(CNN) – El pasado domingo, una instructora de ciencias marinas salió a bucear a finales de la tarde frente a las costas de California; en este paseo tuvo un descubrimiento que primero la sacudió y se fue convirtiendo luego en emoción: se encontró con un pez remo, una criatura que vive en las profundidades del mar y permanece poco conocido al mundo científico y las personas de fuera.
Jasmine Santana se encontraba unos 15 pies (4,6 metros) bajo el agua cuando se encontró con el pez plateado con aletas rojizas y ojos del tamaño de una moneda de 50 centavos, de 18 pies (5,5 metros), que la miraba desde el fondo arenoso. Al darse cuenta de que estaba muerto, cogió la cola del pescado y, utilizando la flotabilidad y la marea baja, impulsó su camino de vuelta a la orilla.
“Al principio me asusté un poco”, dijo Santana, todavía emocionada, quien trabaja para el Instituto marino de la Isla de Catalina desde enero. “Pero cuando me di cuenta que era un pez remo, supe que era inofensivo”.
Después de nadar por 15 minutos tirando del cadáver de 400 libras, necesitó la ayuda de 14 personas para sacar el pescado del agua en Toyon Bay, California.
“Estaba muy sorprendido. Era como ver algo en un sueño”, dijo Mark Waddington, el capitán jefe del barco escuela de CIMI, el ” Tole Mour”, que ayudó a Santana. ” “Es la primera vez que he visto a un pez remo tan grande”.
“Los peces remo se encuentran en todas las aguas tropicales templadas, pero raras veces se ven, vivos o muertos,” CIMI, un grupo educativo de ciencias marinas sin fines de lucro, dijo en un comunicado. “Se cree que los peces remo nadan a más de 3.000 pies (914 metros) de profundidad, por lo que permanecen en gran medida desconocidos. Y se sabe poco acerca de su comportamiento o población”.
Waddington, que ha trabajado en CIMI desde 1994, dijo que no está claro por qué se encontró el pez remo en aguas poco profundas en esta ocasión, pero parecía haber muerto de forma natural.
Waddington dijo que mientras el cadáver del pez remo se conserva en hielo, CIMI ha enviado algunos de sus tejidos y otras muestras a científicos marinos, entre ellos el Dr. Milton Love, un experto en peces de la Universidad de California en Santa Bárbara, para que se estudien su ADN y hábitos alimenticios.
Waddington dijo que es probable que CIMI se quede con el esqueleto del pescado con fines educativos. Su programa atrae a más de 30.000 niños en edad escolar cada año.