Por Laura Smith-Spark y Holly Yan, CNN

Londres (CNN) –
El príncipe Jorge hizo su primera aparición pública en tres meses este miércoles al llegar con sus padres, el príncipe Guillermo y la duquesa de Cambridge, Catalina, para su bautizo en el Palacio de St. James.

El príncipe bebé sonrió cuando lo mostraron a los miembros de su familia, incluidos sus abuelos, la reina Isabel II y el príncipe Felipe, antes de entrar a la capilla real.

Jorge iba vestido con un ropón de satín que es réplica de uno elaborado en 1841 para el bautizo de la hija mayor de la reina Victoria.

El príncipe Jorge, el hijo pequeño de los duques de Cambridge Guillermo y Catalina, será bautizado este miércoles en una poco tradicional y modesta ceremonia.

Solo los amigos cercanos y la familia estarán presentes en el evento en la Capilla Real. Es una clara ruptura a una de las ceremonias más grandes que el padre y abuelo del pequeño príncipe disfrutarán en el Palacio de Buckingham.

Pero el ser bautizado en la Iglesia es más importante para Jorge que para la mayoría. Él está en línea para convertirse en el rey, que lo haría también el gobernante supremo de la iglesia de Inglaterra.

Entre los invitados que serán testigos de la ocasión están: su bisabuela, la reina Isabel II y el príncipe Felipe, así como el príncipe Carlos, la duquesa de Cornualles y el príncipe Harry.

Los padres de Catalina, Carole y Michael Middleton, y hermanos, James y Pippa Middleton, también estarán presentes.

El bebé real tendrá siete padrinos, entre ellos la prima del príncipe Guillermo, Zara Tindall, la hija de la princesa Ana, y los amigos de la universidad de la pareja.

La ceremonia fue oficiada por el arzobispo de Canterbury, monseñor Justin Welby.

En un breve video publicado en su sitio web, Welby habló de la importancia del bautismo del bebé príncipe, ya que “unirá a la familia de la iglesia”, el clip tuvo cerca de 2.000 millones de vistas en todo el mundo.

Welby dijo que cualquier bautizo es un momento para que los padres de familia celebren el nacimiento de su hijo, sea de la realeza o no.

“Todos los bebés son increíblemente especiales, no solo los bebés reales”, dijo.

“Como nación, estamos celebrando el nacimiento de alguien que en su momento será el jefe de Estado. Eso es extraordinario. Te da la sensación de una visión hacia el futuro, un adelanto de la historia, así como el retraso de la misma, y el regalo de tener a esta nueva vida y mirar hacia adelante”, añadió.

El niño de tres meses de edad ya ha hecho historia. Él es el primer bebé real en ser honrado con una moneda de bautizo de la Casa Real de Moneda de Gran Bretaña.

El diseño de las monedas, producida por la Fábrica Real de Monedas, en diferentes tamaños y materiales, ha sido aprobado por sus padres y la reina Isabel II, dijo la Real Casa de la Moneda.

El público podrá comprar el recuerdo que va desde los 21 dólares el más sencillo, hasta los 80.000 dólares en una versión que contiene un kilogramo de oro.

Max Foster contribuyó con este reporte.