(CNN Español) – SeaWorld se defiende frente a las repercusiones que generó el documental Blackfish, presentado por CNN.

La producción habla de maltrato a los mamíferos marinos que se exhiben en SeaWorld.

Los tres parques de SeaWorld en Estados Unidos poseen 28 de las 52 orcas cautivas en el mundo. La empresa asegura que lo que dice el documental no es cierto.

La producción generó una secuela de rechazos que incluyen la suspensión de conciertos por parte de bandas musicales e incluso una de una gira escolar.

SeaWorld publicó anuncios en distintos periódicos de la nación defendiéndose y negando la información reportada. El parque niega las capturas de las ballenas en su hábitat natural y dice que no separa a los bebés de sus madres.

Además, asegura que la esperanza de vida de estos mamíferos no es más corta.

Blackfish da seguimiento a los 39 años de cautiverio de las ballenas del parque hasta el momento del ataque que cobró la vida de Dawn Brancheau, una entrenadora que murió atacada por Tilikum, una orca que ya había sido asociada a dos muertes anteriores.

El documental concluye que la violencia de las ballenas se deriva del estrés y aburrimiento que sufren en cautiverio.