Por Heather Kelly

(CNN) — La visión a futuro de los Google Glass está muy bien “enfocada”.

La compañía anunció este martes que aumentará sus opciones para los lentes de prescripción, una de las características más solicitadas desde que lanzó sus gafas el año pasado.

Este movimiento es el último intento de Google para hacer que la versión beta de sus lentes esté más acorde con la moda y sea un producto que los consumidores deseen, antes de abrirlo al público en general a finales de 2014.

Si estás viendo esta nota en tu móvil, mira aquí la galería.

Los lentes de prescripción estarán disponibles con diferentes diseños y tendrán un costo de 225 dólares.

La nueva línea Titanium incluirá cuatro formas de monturas, marcos o armazones: curvo, delgado, split y atrevido. El exterior de los marcos de titanio es de color gris, pero hay cuatro opciones para los colores dentro de los marcos. Google también está agregando tres opciones para las gafas de sol diseñadas por Maui Jim, que costarán 150 dólares.

Aún no puede popularizarse la venta de Google Glass, ya que el proceso requiere ajustarse. Mientras que la tarea es bastante fácil, el sistema es más complejo. Google está apostando a que los usuarios se sientan tan cómodos que no tengan que elegir entre los Google Glass y sus gafas comunes.

“Vamos a llegar algún día, espero que sea pronto, cuando la gente se pregunte ‘¿por qué querría gafas tradicionales? Si no ellas no hacen x, y o z’”, dijo Steve Lee, director de Google Glass Product.

La fusión de Google Glass con lentes de prescripción podría causar algunos problemas, ya que los usuarios no podrían quitárselas sin limitar su visión, y los lentes habilitados para conectarse a internet no son tan funcionales en muchos lugares.

A principios de este mes, un hombre de Ohio, en Estados Unidos, fue interrogado por la policía local y federal por usar su Google Glass durante la proyección de una película. Las autoridades sospechaban que estaba grabando en secreto la película hasta que él explicó que las gafas estaban apagadas y solo estaban adaptadas a sus lentes de prescripción. (Él había comprado los marcos personalizados por 600 dólares a través de un tercero).

Conducir mientras usas los Google Glass también es un tema  controversial en muchos estados de EU, incluyendo California, donde una mujer fue multada el año pasado por usar el dispositivo mientras manejaba su vehículo. El cargo fue derogado en la corte

Google confía en resolver ese tipo de situaciones, como incluir en los lentes indicadores para detectar cuando están encendidos o apagados. Actualmente no existe un indicador luminoso, pero cuando el dispositivo está encendido, la gente puede ver una tenue luz en la pantalla de cristal.

La compañía espera que los lugares y estados hostiles a las gafas, las acepten pronto. Por ejemplo, hay una aplicación llamada Drive Google Glass, que despierta a los conductores si detecta que se están quedando dormidos. Ese sería un argumento ante las autoridades. Los cines podrían adoptar la tecnología como una forma de entregar la subtitulación de películas a ciertos miembros de la audiencia.

“Creo que es necesario dar a la tecnología la oportunidad de respirar y evolucionar”, dijo el portavoz de Google Glass, Chris Dale.

Los lentes pueden ser caros y no ofrecer seguridad, por lo que Google llegó a un acuerdo con el proveedor de la empresa Vision Service Provider para agregar la cobertura para los usuarios de las nuevas especificaciones. Los reembolsos del seguro se extenderán solo a los marcos y lentes de prescripción.

Los nuevos marcos fueron diseñados por los empleados de Google, a pesar de los rumores anteriores de una posible asociación con la compañía Warby Parker. En el futuro, la empresa espera trabajar con empresas de gafas, para que puedan crear sus propios diseños compatibles con Google Glass.

Los nuevos marcos regulares, por si alguien los usa en el futuro, serán más pequeños y discretos, pero Google piensa que no es algo que los consumidores quieran. Más diseños modulares y asociaciones con terceros podrían ampliar las opciones para que un usuario pueda decidir entre llevar algo llamativo o más discreto.

“A veces quiero salir y yo quiero que me vean, quiero que la gente hable de mis lentes. De hecho, me he dado cuenta que es una de las experiencias más sociales de la historia”, dijo Lee. “Pero otras veces solo quiero seguir con mi negocio y mantener un perfil bajo”