Por Thom Patterson, CNN
(CNN) – Un auto invaluable fue aplastado. Otro, molido; un tercero, quedó como calcomanía. Ahora, la ciudad Vette se enfrenta a un verano de socavón.
Un total de ocho vehículos en el Museo Nacional del Corvette de Bowling Green, Kentucky, siguen estando tan destrozados como cuando la tierra se los tragó enteros hace más de dos meses.
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Los trabajadores sacaron el último auto del monstruoso hundimiento el 9 de abril y hasta ahora no se ha aplicado ni una sola capa de pintura a ninguno de los autos. No se ha eliminado ninguna abolladura. Nada.
¿Por qué? Los funcionarios del museo estaban horrorizados por el destrozo.
“Cuando los últimos tres o cuatro autos fueron sacados del socavón… no esperábamos que salieran viéndose así de mal”, dijo Dana Forrester, representante de la junta directiva del museo a cargo de la restauración de los Corvette.
Entre los más dañados estaba un demonio de la velocidad personalizado, único en su clase que puede acelerar a más de 175 mph (282 kph). … Bueno, podía. El agujero lo redujo, como dijo un funcionario del museo, “a solo un neumático”. Todo este terrible desastre ha sido suficiente para hacer llorar a cualquier mecánico aficionado de los autos.
El próximo mes, la junta directiva del museo planea reunirse con restauradores independientes y la compañía matriz de Chevrolet, General Motors, para considerar nuevas estrategias para rescatar los autos. “Escucharemos lo que tengan que decir sobre esto y luego tomaremos una decisión sobre qué autos serán restaurados y hasta qué grado”, le dijo Forrester a CNN por teléfono.
Sorprendentemente, el museo podría optar por no restaurar para nada los autos que están más destrozados.
Y luego hay otro problema: qué hacer con ese gran agujero de 40 pies de ancho (12 metros) y 60 pies de profundidad (18 metros).
Afortunadamente nadie resultó herido cuando el Skydome del museo, que asemeja la de una catedral, fue profanada en la madrugada del 12 de febrero. La idea de un agujero gigante abriéndose repentinamente en el interior de un museo y que se robaran algunas de las joyas de la corona del mundo automotriz atrajo atención mundial. Los informes estiman el valor total de los autos en más de 1 millón de dólares. Los propietarios y aficionados todavía sienten el dolor.
Incluso a la gente que no le interesan los autos, el Corvette sí les importa. Es histórico. Los expertos llaman al Corvette el auto más coleccionado en Estados Unidos. Estamos hablando del “auto de pasajeros que ha sido producido por más tiempo de forma continua en el mundo,” según General Motors. Desde el debut del Vette en 1953, más de 1,5 millones han salido de las líneas de ensamble de Chevrolet, creando empleos para varias generaciones de estadounidenses. La silueta elegante se ha transformado en un icono de la cultura pop a través de la televisión, el cine y la publicidad.
Aunque GM anunció en febrero que “supervisar” la restauración de los Corvette, ahora hay más opciones sobre la mesa.
“Las discusiones recientes han cambiado lo que se pensó originalmente”, dijo Forrester, quien también dirige la National Corvette Restorers Society. La restauración de algunos de los autos “no será posible”, dijo. O para algunos de los autos, “podría ser mejor” que un restaurador independiente, que no sea GM, lo haga.
El museo no lucrativo que opera con fondos privados, está regido por la junta directiva, pero manejado por sus donantes y 28.000 miembros. No piensen que los aficionados de los ‘Vette de todo el mundo no están observando de cerca. Lo están haciendo. Y les interesan los detalles.
“Creo que deberían hacerlo de la manera correcta y entregar un producto terminado como si no hubiera sido dañado en lo absoluto”, dijo el propietario de años de un Corvette de Nueva York, Frazer Bharucha, de 47 años, de la Asociación de Propietarios de Corvette de Long Island. “Cuando todo esté dicho y hecho, debería lucir de la misma forma que estaba cuando ingresó al museo por primera vez”.
Para las personas de fuera, restaurar un Corvette “correctamente” puede parecer, bueno, un tanto obsesivo. La atención a los detalles incluye a veces las cabezas específicas de los pernos del motor o los focos delanteros originales, o incluso un juego de llantas originales de 10.000 dólares. ¿Será que los autos del socavón recibirán el mismo nivel de tratamiento? “No creo que lleguen tan lejos”, dijo Forrester.
La meta de GM es la “restauración adecuada”, dijo el gerente de comunicaciones de Corvette, Monte Doran. Se espera que Doran participe en las reuniones con los funcionarios del museo donde el prevé una “conversación seria para ver si ellos quieren que restauremos todos los autos”.
El diseñador de GM dice: salven sus ‘almas’
Solo tengan cuidado, aconsejó Tom Peters, director de diseño exterior de GM para autos de alto rendimiento. Respeten los vehículos. Ellos tienen “almas”. Ellos tienen “personalidad” y “ser”. Sustituir demasiadas piezas originales importantes podría resultar en “recreaciones” en lugar de restauraciones, dijo.
Peters se describió como un defensor apasionado del museo que no está involucrado en el proyecto de restauración en lo más mínimo. “Tienes que preguntar, ¿qué será necesario para que estos autos vuelvan a ser auténticos? Es realmente terrible, pero los dos últimos que sacaron básicamente estaban pura calcomanía”, dijo. Es difícil saber a ciencia cierta, y demasiado pronto para decirlo, pero “tal vez es mejor simplemente dejarlos como están”.
Las decisiones sobre qué autos restaurar podría basarse en algunas de estas preguntas:
¿Se conservaron los paneles únicos de la carrocería del auto? ¿El auto aún conserva su integridad estructural? ¿Su armazón fundamental sufrió demasiado daño?
Los más dañados:
-El auto de carreras personalizado, único en su clase Mallett Hammer Z06 2001.
-El ZR-1 Spyder 1993 propiedad de GM; se fabricaron menos de 12.
Dañados significativamente:
-El PPG Pace Car 1984; un auto único de su clase para el IndyCar World Series.
-El modelo Ruby Red 40th Anniversary 1993; se fabricaron más de 6.000.
-1992 el Corvette ‘número 1 millón’ salido de la línea de ensamblaje
-El Corvette ‘número 1,5 millones’ 2009 salido de la línea de ensamblaje
Menos dañados:
-ZR1 Blue Devil 2009, entre los autos de producción más rápidos de GM
-El Corvette tuxedo negro 1962, el auto más antiguo tragado por el socavón
Memoria institucional
El negro del ’62 plantea otra gran pregunta: ¿GM todavía tiene suficiente memoria institucional para restaurar de la mejor manera un auto que tiene más de medio siglo de edad? ¿Deberían traerse especialistas independientes para ayudar?
“Podría ser mejor que lo hagan otros restauradores”, dijo Forrester. “Sé que GM tiene la experiencia necesaria para volver y tomar los [dos] autos que todavía posee y trabajar en ellos hasta cierto punto, pero en cuanto al trabajo estructural … no lo sé. Estoy seguro que eso entrará a discusión”.
Ah, sobre ese agujero de 18 metros de profundidad en el suelo…
En un aparente golpe maestro del genio del mercadeo, el museo ha puesto a los autos destrozados en exhibición para los visitantes, más o menos una versión de un espectáculo de fenómenos del carnaval de autos deportivos.
Además, de forma temporal, el museo tiene previsto permitir que los visitantes tengan fácil acceso al agujero este fin de semana. Van a poder pararse en el Skydome a casi 1 metro de la orilla, donde pueden darle un buen vistazo a las fuerzas naturales que aplastaron a los autos.
Las nuevas exhibiciones parecen ser populares. En marzo, la asistencia se disparó a más de 50%. Las donaciones tras el colapso del socavón ya han alcanzado los 75.000 dólares.
“Es el efecto de la curiosidad”, dijo la portavoz del museo, Katie Frassinelli.
Todo el desastre es ahora “parte de la historia del museo, y parte de la historia del Corvette”, dijo Forrester. La idea es, ¿por qué no aceptarlo?
Los funcionarios del museo aún no han decidido una estrategia a largo plazo para encargarse del socavón.
Se ha hablado sobre dejar el agujero abierto como una exhibición permanente y construir gradas para que los visitantes puedan bajar el mismo.
Otra opción sería la de devolver el Skydome a su condición original, llenando el socavón con tierra, y reemplazar el piso que se derrumbó.
“Personalmente me inclino por asegurar el agujero, pero no llenándolo, y crear algo así como un puente sobre el mismo para que la gente puede mirar hacia abajo desde el mismo”, dijo Forrester. Como artista consumado, Forrester ha pintado un lienzo acuarela que representa el agujero y el ZR1 2009 Blue Devil subiendo del mismo.
Si existe un lado bueno del derrumbe del socavón, Forrester cree que lo ha encontrado. “Millones de personas en la cultura de Corvette han trabajado juntos sobre esto”, dijo. “Ahora, mucha gente fuera de la comunidad está descubriendo lo especial que realmente es esta cultura”.