Por James O’Toole, CNNMoney
(CNNMoney) – Mientras los manifestantes de todo Estados Unidos piden a las cadenas de comida rápida que aumenten sus salarios, algunas compañías han empezado a experimentar con la nueva tecnología que podría reducir significativamente el número de los trabajadores de restaurantes en los próximos años.
Los patrocinadores de la industria de restaurantes advierten que un aumento drástico de los salarios sería contraproducente, ya que la automatización sería más atractiva y más trabajadores estarían en riesgo de perder sus empleos.
“Al enfrentarse a una resolución de un salario de 15 dólares, los restaurantes tienen que reducir el costo del servicio”, se anunció en una publicación hecha en el The Wall Street Journal el año pasado por el Employment Policies Institute, el cual apoya los intereses corporativos. “Eso implica menos empleos de nivel inicial y más alternativas automatizadas - incluso en la cocina”.
Otros observadores de la industria no son tan definitivos, destacando que se necesita tiempo para introducir la nueva tecnología y que la interacción humana siempre ha sido un componente importante en el negocio de los restaurantes. Lo que al menos está claro es que el software y las máquinas jugarán un papel cada vez más importante en nuestras experiencias culinarias en el futuro.
Panera Bread (PNRA) es la cadena más reciente en introducir un servicio automatizado; el mes pasado anunció que tiene planificado introducir quioscos de autoservicio y una opción móvil para ordenar en todas sus sedes en los próximos tres años. Las noticias siguen decisiones por parte de Chili’s y Applebee’s de colocar tabletas en sus mesas que permitan a los comensales ordenar y pagar sin interactuar con personal humano en absoluto.
Panera, la cual gastó 42 millones de dólares en el desarrollo de su nuevo sistema, afirma que no tiene previsto hacer ningún recorte de empleos como resultado de la tecnología, pero algunos analistas consideran que este tipo de cambio es inevitable para la industria.
En un artículo ampliamente citado que fue publicado el año pasado, los investigadores de la Universidad de Oxford estimaron que existe una posibilidad del 92% respecto a que la preparación de la comida rápida y la atención serán automatizadas en las próximas décadas.
Con la tecnología de inteligencia artificial como la plataforma Watson de IBM (IBM, Fortune 500) que ha hecho grandes progresos en el razonamiento avanzado y en la comprensión del lenguaje, no es difícil ver cómo pueden ser diseñados los robots para proporcionar interacciones más sofisticadas con los clientes del restaurante de lo que pueden manejar los quioscos.
Los conductores de reparto podrían ser reemplazados de forma masiva por los vehículos autónomos, los cuales probablemente lleguen al mercado dentro de una década o dos, o incluso aviones no tripulados. En la preparación de alimentos, hay empresas nuevas que ofrecen robots para atender un bar y para preparar hamburguesas gourmet. Una empresa de procesamiento de alimentos en España ahora utiliza robots para inspeccionar las cabezas de lechuga en una cinta transportadora, desechando las que no cumplen con los estándares de la compañía, informaron los investigadores de Oxford.
Darren Tristano, un experto en la industria de alimentos de la firma de investigación de Technomic, dijo que la tecnología digital “poco a poco y con el tiempo, creará eficiencia y ahorro de mano de obra” para los restaurantes. Sin embargo, él supuso que como resultado de eso, las fuerzas de trabajo solo se reducirían en un 5% o 10% como máximo en las próximas décadas, dadas las expectativas que los clientes tienen de la experiencia culinaria.
“Si nos detenemos a ver los miles de años en los que la gente le ha servido alcohol y comida a los consumidores, es difícil imaginar que las cosas vayan a cambiar tan rápidamente”, dijo.