(CNN Español) – El presidente Juan Manuel Santos consiguió su reelección con una propuesta fundamental: la paz. El actual proceso de negociación con las FARC y los diálogos exploratorios con el ELN fueron su bandera para que un nuevo gobierno bajo su mando logre terminar el conflicto en Colombia.
En entrevista con Patricia Janiot, Santos recordó que “todo lo que estamos acordando va a ser refrendado por los colombianos” y que el proceso no contempla ni indultos ni amnistías.
“En la justicia transicional no está contemplado el perdón y olvido”, señaló.
Según el mandatario reelecto,”los crímenes de lesa humanidad no pueden quedar impunes”, por lo que habrá penas para quienes los hayan cometido. Además, añadió que no se van a sacrificar los derechos de las víctimas.
Santos expresó que el reto es consolidar la institucionalidad en las regiones más azotadas por el conflicto.
El presidente dijo que hay puntos clave del proceso con las FARC, como las víctimas y la justicia transicional, que son los mismos que se acuerden con el ELN.
Dijo que el resultado de las elecciones fue un “mandato del pueblo colombiano para terminar el conflicto”.
Santos dijo que su rival en las elecciones, Óscar Iván Zuluaga, lo llamó 45 minutos después del cierre de las urnas y le dijo “usted ganó en franca lid”, algo que el presidente calificó como un acto de gallardía.
El mandatario dijo que quiere dejar de hablar sobre el expresidente y senador electo Álvaro Uribe Vélez —su antiguo aliado y hoy principal opositor— y que pretende dejar atrás “el odio y el rencor”. Santos señaló que fue una “irresponsabilidad” de Uribe hacer acusaciones en su contra sin tener pruebas (el expresidente denunció que a la campaña de Santos en 2010 entraron 2 millones de dólares del narcotráfico, aunque no presentó evidencias a la Fiscalía).
Santos rechazó la posibilidad de que parte de las Fuerzas Armadas sigan a Uribe y puedan ser motivadas a una insurrección. “Las Fuerzas Armadas están como una solo pieza” y “apoyan el proceso de paz, porque la paz para un soldado es la victoria”.
El presidente electo respondió a las críticas contra los comerciales de televisión en los que aparece Humberto de la Calle, jefe negociador del Gobierno en La Habana, explicando el actual proceso de diálogo.
“Hacer pedagogía sobre la paz es una obligación del Gobierno Nacional”, dijo, y manifestó que es contradictorio que antes lo criticaran por no explicar los alcances del proceso de paz y ahora los mismos lo critiquen por hacerlo.
Santos expresó que le gusta y respeta las críticas, siempre y cuando sean en juego limpio. Además, dijo que no le preocupa la presencia de los uribistas opositores en el Congreso: “La oposición es una minoría en el Congreso”.
El presidente cree que los grupos políticos —como el Polo Democrático y algunos miembros de la Alianza Verde— que apoyaron su reelección pero que dijeron que se mantendrán en la oposición se han dado cuenta que su gobierno es “bastante progresista” por sus políticas dirigidas a los más vulnerables.
Santos explicó que acordó con Clara López la gratuidad en la educación y discutió temas como la presencia de la oposición en la Comisión de Relaciones Exteriores y el mínimo vital de agua.
Además, dijo que se sentiría honrado de tener a Antanas Mockus —su rival en las elecciones de 2010— en su nuevo gabinete, debido a su compromiso férreo con el proceso de paz.
El mandatario aseguró que su gobierno aprobó un gran número de reformas que han permitido que haya prosperidad y cambios en favor de la población.