Eres bebedor empedernido si eres una mujer y tomas 8 o más tragos a la semana o si eres hombre y tomas 15 o más tragos por semana.

Por Jen Christensen

(CNN) — Sheldon Shiraki se sienta en la barra del moderno restaurante Fritti en Atlanta, para beber alegremente un cóctel frío.

Al preguntársele cuántas bebidas serían necesarias para que el gobierno lo considerara un “bebedor empedernido”, él se ríe.

“No sé —quizás de 25 a 30 bebidas”, dice Shiraki.

“¿Al mes?”, pregunté.

“A la semana”, dice Shiraki con una sonrisa.

“Déjame hacer los cálculos”, dice su amiga Pamela Gjerde desde el siguiente taburete del bar. Como lugareña, llama al camarero por su nombre y dice que beberá una copa de vino blanco un par de días a la semana. Para que una mujer ser considerada una “bebedora empedernida”, ella cree que tendría que beber de 15 a 20 bebidas semanalmente.

Ambos parecían sorprendidos al enterarse que ellos sobreestimaron seriamente el número.

Una de cada 10 muertes de adultos entre 29 y 64 años de edad se debe al consumo excesivo de alcohol, según indican los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades en un informe publicado el miércoles. Eso significa que unas 88.000 personas murieron en un año como resultado del consumo excesivo de alcohol. La mayoría son hombres -alrededor del 70%.

¿Te consideras un bebedor ligero, moderado o empedernido? Las agencias de salud tienen estas definiciones para ayudarte a comprender cuándo tu consumo de alcohol puede llegar a ser un problema de salud.

Las mujeres son consideradas “bebedoras empedernidas” si toman ocho o más tragos a la semana, según los CDC. Los hombres pueden tomar 14. Si bebes 15, tú, mi amigo, eres un “bebedor empedernido” ante los ojos de los CDC.

La definición es diferente para las mujeres porque los cuerpos de las mujeres son más pequeños que los de los hombres. También metabolizan menos alcohol en el estómago, lo que significa que más termina en su torrente sanguíneo.

Un “trago” estándar por cierto, no es un tarro grande con escarcha o ese vaso gigante Hurricane que guardaste de Mardi Gras. Los CDC dicen que una bebida de 12 onzas de cerveza (5% de contenido de alcohol), 8 onzas de licor de malta (7% de contenido de alcohol), 5 onzas de vino (12% de contenido de alcohol) o 1.5 onzas de 80 grados (40% de contenido de alcohol), bebidas alcohólicas destiladas o licor -el término sofisticado para la ginebra, el ron, el vodka, el whisky, etc.

“Eso es realmente bajo”, dice Shiraki. “Yo pensaría que alguien es un bebedor empedernido, si se embriaga todo el tiempo. Dos o tres noches no lo harían”.

“Esa definición es una locura”.

Consumo de alcohol excesivo

“La definición de ‘bebedor empedernido’ ha evolucionado en los últimos 20 años y se basa en la evidencia científica sobre las consecuencias perjudiciales de beber demasiado”, dice George F. Koob, director del Instituto Nacional sobre el Abuso de Alcohol y Alcoholismo [NIAAA, por sus siglas en inglés], quien ha estado en los comités que crean esas definiciones.

La definición que el NIAAA tiene en su página web de “bebedor empedernido” o “en riesgo” es el mismo que la definición de los CDC.

Sin embargo, la Encuesta Nacional sobre Uso de Drogas y la Salud tiene otra. Ellos dicen que el “consumo excesivo” es de “cinco a más tragos en la misma ocasión, en cada cinco o más días en los últimos 30 días”.

Entonces, ¿cuál es?

“Es imprecisa y no cuantitativa. Trato de evitar el uso de términos como “empedernido”, “ligero” y “moderado” por eso en mis publicaciones”, dice el Dr. Arthur Klatsky, quien ha estado estudiando el alcohol y sus efectos en los seres humanos durante décadas. “El problema es que todos siempre quieren saber si encajan en una de esas categorías”.

Koob dice que las definiciones varían porque “no están siendo entregadas a Moisés por parte de Dios en el Monte Olimpo”. Se basan en estudios epidemiológicos que muestran las consecuencias negativas a largo plazo del consumo excesivo de alcohol.

La Encuesta Nacional sobre Uso de Drogas y la Salud del 2012 descubrió que el consumo excesivo de alcohol fue reportado por el 6.5% de la población mayor de 12. Eso es alrededor de 17 millones de personas. La tasa fue la misma en el 2011.

Esas estadísticas probablemente subestiman los números reales, según lo afirma tanto Koob como Klatsky.

Beber empedernidamente puede llevar a enfermedades crónicas, como problemas en el hígado, la garganta, la laringe y el esófago. Puede llevar a presión arterial alta, problemas psicológicos y pancreatitis. Incluso te pone en mayor riesgo de convertirte en una víctima de violencia.

Y, por supuesto, finalmente te arriesgas a convertirte en un alcohólico.

¿Demasiado -o no lo suficiente?

Una de cada 4 personas que caen en la categoría de “consumo de alcohol excesivo” ya tienen un problema de abuso de alcohol, de acuerdo con el NIAAA. Los bebedores compulsivos - mujeres que beben más de cuatro tragos en una salida y los hombres que beben más de cinco - son una preocupación cada vez mayor.

“La verdadera preocupación en estos días es el número de jóvenes que se emborrachan en la universidad”, dice Koob. “Todos tuvimos 21 años alguna vez, todos bebimos, pero lo que esta generación consideraba intoxicado se ha duplicado en los últimos 20 años”.

“Beber en exceso se ha convertido en una norma preocupante”.

Esto no solo pone a los estudiantes en riesgo de violencia, acoso sexual y todas las enfermedades antes mencionadas, sino que también puede dañar sus cerebros. La corteza frontal - la parte del cerebro que ayuda a tomar decisiones y controlar la impulsividad - no se desarrolla completamente hasta que tienes 25 años. El consumo excesivo de alcohol, según muestran los estudios, puede retrasar el desarrollo de la función ejecutiva.

Klatsky dice que el patrón cuando bebes es tan importante para tu salud como la cantidad total. Abstenerse gran parte de la semana y luego beber siete copas el sábado, también es malo para tu salud.

Además de saber qué define el “consumo excesivo de alcohol”, la gente también debe saber qué es el consumo “ligero” y “moderado”, dice Koob.

Los estudios muestran que la tasa de mortalidad para las personas que beben moderadamente a diario es en realidad más bajo que aquellos que se abstienen.

“Existen beneficios para la salud a un nivel más bajo de consumo de alcohol”.

Klatsky dice que es más importante enfocarse en el asunto más amplio de los problemas de alcohol que quedar atrapados en la semántica.

“Hay una viejo chiste que todos los que fuimos a la escuela de medicina solíamos oír”, dice Klatsky. “La definición de algo como un” bebedor empedernido” es un trago más del límite superior de lo que bebe la persona que está redactando la definición”.