Por Kareem Khadder, Jethro Mullen y Josh Levs, CNN
(CNN) — El descubrimiento del cuerpo de un niño en Jerusalén la madrugada de este miércoles provocó enfrentamientos entre israelíes y palestinos, lo que aumenta aún más las tensiones de esta semana tras el descubrimiento de los cadáveres de tres adolescentes israelíes.
La policía israelí dice que están investigando si la muerte en Jerusalén fue una represalia por la muerte de los adolescentes en Cisjordania.
El cuerpo fue descubierto una hora después de que se notificó a la policía que un adolescente palestino había sido forzado a subir a un auto en el barrio de Beit Hanina, de Jerusalén.
“Nos estamos concentrando en dos cosas”, dijo el vocero de la policía israelí, Mickey Rosenfeld. “Si los dos incidentes están relacionados, y estamos investigando si esto es un crimen nacionalista”.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, pidió una investigación rápida para encontrar a “quién está detrás de este asesinato despreciable y los antecedentes de este acto”, según un comunicado de su oficina.
“El primer ministro Netanyahu pide a todas las partes a no tomar la ley en sus propias manos. Israel es un país de derecho y todo el mundo tiene la orden de actuar conforme a la ley”.
La televisora palestina Aqsa fue menos cauta, e informó que Mohammad Abu Khedair, un joven de 17 años procedente de Jerusalén, fue secuestrado y asesinado por los colonos en Jerusalén.
El primo del adolescente Majdi Abu Khedair dijo que quien llevó a cabo el secuestro estaba conduciendo un coche que había sido utilizado en un intento de secuestro anterior, hace dos días.
“Culpamos a la policía israelí por el secuestro y asesinato (de Mohammad) y su incineración”, dijo Khedair. “La policía israelí y el gobierno israelí deben hacer lo mismo que ellos han hecho en Hebrón: demoler y aplastar las casas de los colonos que han hecho este crimen”.
El ejército israelí destruyó las viviendas de los dos sospechosos de los asesinatos de los tres jóvenes israelíes.
Cuando las noticias de la muerte del chico se propagaron, hubo enfrentamientos entre los residentes palestinos y las fuerzas de seguridad israelíes en Shuafat, un barrio de Jerusalén, dijeron testigos.
Los residentes lanzaron piedras contra las fuerzas de seguridad israelíes. Los israelíes respondieron con disparos ocasionales de granadas de aturdimiento o de gas lacrimógeno.
“Este es un acto horrible y bárbaro que condeno firmemente”, dijo el alcalde de Jerusalén, Nir Barkat. “Este no es nuestro camino y estoy plenamente confiado en que nuestras fuerzas de seguridad llevarán a los responsables ante la justicia. Hago un llamado a todos a actuar con moderación”.
Las tensiones en la región han estado al rojo vivo desde el lunes, cuando se encontraron los cuerpos de los adolescentes —Eyal Yifrach, de 19 años; Gilad Shaar, de 16; y Naftali Frankel, un ciudadano con doble nacionalidad estadounidense-israelí de 16 años— en un campo en Cisjordania.
Los tres fueron secuestrados cuando caminaban a casa desde la escuela dos semanas antes.
El martes, después de los funerales de los adolescentes, varios grupos de hombres marcharon alrededor de Jerusalén, cantando “muerte a los árabes”.
El gobierno israelí culpa a Hamas, una organización islámica militante palestina, por los asesinatos. Hamas elogió los secuestros, pero negó que fuera responsable de lo ocurrido.
El lunes por la noche, Israel intensificó los ataques aéreos en lo que calificó como la infraestructura terrorista en Gaza, en respuesta a los cohetes lanzados hacia Israel. El martes por la noche no hubo informes de ataques aéreos.
Atika Shubert, Ben Wedeman, Michael Schwartz y Ali Younes contribuyeron con este reporte.