Por Frida Ghitis
Nota del editor: Frida Ghitis es columnista de asuntos internacionales del diario estadounidense The Miami Herald. Fue productora y corresponsal de CNN y escribió el libro The End of Revolution: A Changing World in the Age of Live Television. Síguela en Twitter en@FridaGhitis.
(CNN) – La ronda actual de combates entre Hamas e Israel se detendrá algún día. Cuando eso ocurra, los israelíes y palestinos, dolientes y exhaustos, seguirán siendo vecinos. Sus diferencias persistirán.
Las consecuencias de esta guerra resonarán no solo en Gaza, en la Margen Occidental y en Israel, sino en las calles de El Cairo y Riad, en las cafeterías y salas de París, en las cancillerías de los países árabes y en las salas de juntas del Departamento de Estado de Estados Unidos. Esta guerra ha dejado al descubierto nervios dañados, prejuicios profundos y políticas fallidas.
Estos son cinco lugares en los que notaremos el impacto una vez que los combates cesen.
Israel
Mientras los israelíes buscaban refugiarse de los cohetes de Hamas, y el grupo islamista que opera en Gaza anunció que también atacaría a los vuelos que entraran y salieran del aeropuerto principal de Israel, una conductora de televisión de Líbano hizo una sugerencia de lo más perjudicial.
Dijo que Irán debería entregar sus armas nucleares a Hamas para combatir a Israel. Mientras tanto, el líder supremo de Irán reiteró que desea que Israel quede eliminado.
Estos mensajes recuerdan a los israelíes la gravedad de su situación. A Hamas no le interesa una solución bilateral. Está decidido a eliminar a Israel. Los israelíes están en desacuerdo respecto a los asentamientos y al retiro de la Margen Occidental. Pero cuando se trata de Hamas, no hay dudas. En los estatutos de Hamas se establece que “nuestra lucha contra los judíos es muy grande y muy seria”.
Como lo dijo el escritor David Grossman, los izquierdistas de Israel ahora ven que “los temores de la derecha no son simple paranoia” y que la derecha verá que el uso de la fuerza tiene límites.
Esta lucha socavará la posición de la extrema izquierda y de la extrema derecha en Israel e impulsará a los defensores pragmáticos de la seguridad. Resurgirán los llamados a debatir para encontrar otras opciones y para fortalecer a los palestinos más moderados, quienes han perdido terreno ante Hamas.
La urgencia de encontrar una nueva forma de avanzar con los palestinos moderados resurgirá una vez que se apacigüen los nervios.
Sin embargo, ha crecido un viejo obstáculo: el mayor temor de los israelíes es que el Estado palestino caiga en manos de los extremistas, como ocurrió con Gaza y Hamas, y que reciban armas de Irán y otros países. Ahora no hay forma de que los israelíes acepten un Estado palestino armado que se encuentre conectado por túneles a sus ciudades principales, especialmente si Hamas sigue siendo un jugador peligroso.
Palestinos
Las bravatas de Hamas y sus matanzas de israelíes tal vez hayan acrecentado la popularidad del grupo. Sin embargo, los palestinos analizan las tácticas de Hamas. Culparán principalmente a Israel, sin duda, pero echarán un vistazo a la estrategia de Hamas que provocó tanta muerte y destrucción.
El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, fue uno de los primeros en decirlo públicamente. Cuando Israel advertía a Hamas que dejara de disparar los cohetes que desencadenaron una ofensiva terrestre, Abbas parecía exasperado. “¿Qué tratan de lograr lanzando cohetes?, preguntó a Hamas y agregó: “preferimos luchar con sabiduría”.
Los combatientes de Hamas están ocultos en los túneles y llevan el fuego israelí a las zonas civiles, así que no importa qué tanto odies a tu enemigo, se trata de una táctica que exige análisis, si no es que un franco rechazo.
En un giro radical respecto a los conflictos previos, las críticas contra Hamas se generalizaron en los medios de comunicación árabes. Particularmente los periodistas egipcios lanzaron ataques fulminantes contra Hamas.
Europa
El sufrimiento de la población palestina de Gaza ha sido un aspecto desalentador de este conflicto y apenas sorprende que haya suscitado protestas, en particular en las ciudades que tienen numerosas poblaciones musulmanas. Pero lo que ocurrió en varias ciudades de Francia, Alemania, Bélgica, Holanda y otras partes fue algo que trascendió las muestras de empatía por las víctimas de la guerra o el rechazo a las tácticas de Israel.
En Europa se dieron algunos de los peores brotes de antisemitismo descarado desde la década de 1940.
Quienes critican a Israel a menudo afirman que se esconde injustamente de los críticos y acusa antisemitismo; sin embargo, los gritos de “muerte a los judíos”, “degüellen a los judíos” o “los judíos a las cámaras de gas” –junto con la destrucción e incendio de las tiendas de judíos y los ataques a las sinagogas– levantaron el velo y revelaron un sentir antijudío que sigue muy arraigado y del que la gente educada no habla en muchos casos.
Descubriremos qué tan en serio toman el asunto los líderes europeos ahora que descubrieron lo que se ocultaba tras el telón de la retórica civilizada.
Medio Oriente
La guerra entre Israel y Hamas puso de relieve las nacientes alianzas ideológicas y políticas en un Medio Oriente nuevo. Turquía y Qatar surgieron como los defensores de Hamas. Su apoyo a la Hermandad Musulmana durante la Primavera Árabe cobró cada vez más audacia. Ahora, ambos países se volvieron defensores de los grupos islamistas de la región y provocaron la furia de otros gobiernos árabes.
Defender a los islamistas en Gaza beneficia particularmente a sus objetivos políticos ya que la causa palestina atrae el apoyo del pueblo. Por eso, es tan notable que Egipto haya decidido retroceder. Egipto y su nuevo gobierno han asumido una postura firme en contra de Hamas y choca cada vez más con sus simpatizantes, en particular con Turquía. Estas alianzas políticas complican las cosas para el gobierno estadounidense.
Estados Unidos
Los combates en Gaza, aunados a las dramáticas imágenes de los civiles palestinos muertos y a los miles de cohetes que Hamas ha lanzado contra los civiles israelíes, han provocado una paradoja diplomática en Washington. Israel es el principal aliado de Estados Unidos en la región. Sin embargo, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, tienen desacuerdos.
En vez de asumir una postura firme en apoyo a Israel, Estados Unidos ha entablado relaciones diplomáticas con Qatar –país que apoya a los enemigos más letales de Israel– y con Turquía, cuyos líderes han calumniado a Israel.
Los detalles del proceso diplomático –que asombrosamente excluyó a los palestinos moderados– han consternado a Israel, han suscitado la furia en los círculos palestinos y el desdén en Egipto. Cuando llegue un alto al fuego, Estados Unidos debería revisar cómo equilibra a sus aliados y a sus antagonistas en tiempos de crisis, porque aunque los combates cesen, este conflicto no está cerca de terminar.
Las opiniones recogidas en este texto pertenecen exclusivamente a Frida Ghitis.