Por Simon Rushton
(CNN) — Las agencias de medios de comunicación alrededor del mundo toman sus medidas para proteger a sus trabajadores, pero los reporteros que están en mayor peligro son los freelancers, y aquellos reportando sobre un conflicto en su propio país.
En agosto pasado, los peligros que enfrentaron los periodistas fueron llevados a las primeras planas mediáticas con el asesinato de dos periodistas freelance estadounidenses.
Al mismo tiempo, el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés), reportó que al menos 70 periodistas han sido asesinados desde que comenzó el conflicto en Siria; más de 80 han sido secuestrados y unos 20 están desaparecidos.
Steven Sotloff desapareció mientras reportaba en Siria en agosto de 2013.
Su muerte, que emergió mediante un video de ISIS difundido el martes, se dio después de que en un video previo el grupo militante decapitó a James Foley, que también fue secuestrado en territorio sirio.
Al respecto, el Comité para la Protección de los Periodistas dijo: “condenamos en los términos más fuertes posibles la muerte del periodista Steven Sotloff. Él, como James Foley, acudió a Siria para contar una historia. Eran civiles, no representantes de ningún gobierno. Sus asesinatos son crímenes de guerra y aquellos que los cometan deben de ser llevados rápidamente a la justicia”.
El Instituto de Seguridad de Noticias Internacionales (INSI, por sus siglas en inglés) reportó que la semana pasada otros cuatro trabajadores de medios de comunicación murieron, uno en Gaza y tres en Paquistán.
INSI mencionó que los países con mayor riesgo para los periodistas son Iraq, Siria, Paquistán, Afganistán, Yemen, Somalia, Egipto, Sudán, República Africana Central de Chad, Congo y Nigeria.
A pesar de las medidas de precaución disponibles, como un entrenamiento ante un ambiente hostil y equipos de seguridad, muchos freelancers están en el campo, lo que los pone en un riesgo grande, expresó Rory Peck Trust, que apoya a freelancers.
La directora de Trust Tina Carr mencionó: “hemos apoyado a freelancerspor casi dos décadas, y nunca habíamos visto una demanda de apoyo como esta”.
La funcionaria añadió que incluso cuando los asesinatos de periodistas a manos de ISIS fueron ampliamente difundidos a nivel mundial, la mayoría de los reporteros que murieron estaban trabajando en sus propios países; generalmente no pueden abandonar sus naciones cuando se vuelve muy peligroso, o cuando su labor los exponía a un riesgo mayor.