Por Tim Hume y Euan McKirdy
HONG KONG (CNN) — Los habitantes de Hong Kong celebraron el Día Nacional de China en un miércoles sin precedentes, ya que grandes multitudes de manifestantes prodemocracia abarrotaron las calles del centro financiero de Asia en lo que era un día decisivo en la llamada Revolución de los paraguas.
Grandes multitudes salieron a las calles en la fecha anual festiva que marca el aniversario de la fundación de la República Popular de China. Desde 1997, cuando la soberanía de Hong Kong fue devuelta a China, la fiesta ha estado marcada por un despliegue de fuegos artificiales enormes, que fue cancelada este año debido a la inestabilidad política.
A medida que el día avanzaba, más y más personas se unieron a un núcleo de manifestantes que habían soportado las fuertes lluvias durante toda la noche.
En una conferencia de prensa el miércoles por la tarde (hora local), la Federación de Estudiantes de Hong Kong, uno de los principales grupos que organiza la protesta, dijo que están preparados para la campaña de desobediencia civil si el jefe del Ejecutivo no renuncia.
“Si C. Y. Leung no renuncia esta noche o mañana por la noche, vamos a anunciar (planes) para escalar la operación”, dijo Lester Shum, uno de los líderes de la organización. “Esto significa ocupar diferentes edificios importantes del gobierno”.
El movimiento estudiantil también descartó conversaciones directas con el jefe del Ejecutivo. “Estamos abiertos a negociar con los gobiernos de Hong Kong y de China, pero no vamos a hablar con C. Y. Leung”, dijo Shum.
Más temprano, Hui Chun-tak, el superintendente jefe de Servicio de Relaciones Públicas de la Policía, dijo que aunque las protestas se mantuvieron en calma, la policía seguiría vigilando las calles para garantizar el orden y la seguridad pública.
En total, 83 personas han resultado heridas en las protestas en curso, de acuerdo con un funcionario de prensa del gobierno. La prensa oficial no hizo comentarios sobre la naturaleza o el alcance de las lesiones.
Primerizos en las manifestaciones
Algunos manifestantes se estaban uniendo a las protestas por primera vez. Nic Lam, un empleado de Tecnologías de 35 años, dijo que su trabajo y su familia lo habían mantenido alejado, pero el día festivo le habían permitido asistir y expresar su “larga insatisfacción” con el gobierno de Hong Kong.
Muchas familias estuvieron presentes en el lugar de la protesta principal, que se desarrollaba en un ambiente festivo, con presentaciones de bandas de música.
Mientras la bandera de China fue llevada a lo largo del territorio semiautónomo de Hong Kong para la celebración del Día Nacional, los manifestantes expresaron sus quejas con protestas contenidas.
En el izamiento de la bandera en la Plaza Dorada Bauhiniaa, el líder prodemocracia Joshua Wong, de 17 años, protestó junto a Wan Chai y otros estudiantes.
Liderados por Wong, quien fue detenido el viernes durante las protestas y luego liberado dos días más tarde, el grupo le dio la espalda a la bandera y levantó sus brazos en cruz durante el acto.
“Cruzamos nuestros brazos porque queremos expresar nuestro descontento hacia el gobierno, para reflejar nuestra desconfianza hacia el gobierno central chino, y para oponernos a la decisión de la Asamblea Popular Nacional el 31 de agosto”, dijo Wong.
Él se refiriéndose a la polémica decisión de Beijing de permitir que sólo los candidatos aprobados por un comité se postulen al cargo de jefe del Ejecutivo.
Hubo una protesta notable en una recepción oficial después, cuando el concejal del distrito local Paul Zimmerman abrió un paraguas amarillo —un símbolo del movimiento de protesta— en presencia de C. Y. Leung, quien se dirigía a los asistentes.
Las protestas se han desencadenado por los planes de Beijing para el futuro político de Hong Kong, específicamente la reciente decisión de ‘palomear’ a los candidatos para el puesto de jefe del Ejecutivo en 2017.
Temen que la independencia del territorio se está escapando, y acusan a Leung de poner el gobierno central de China por delante de sus propios ciudadanos.
Deben aceptar el acuerdo: Leung
En su discurso en la recepción del Día Nacional, Leung dijo a los asistentes que los habitantes de Hong Kong debería aceptar el acuerdo sobre sus elecciones de 2017 tal y como está.
“Es comprensible que diferentes personas puedan tener diferentes ideas acerca de un paquete de reforma deseable. Pero definitivamente es mejor tener el sufragio universal que no tenerlo”, dijo.
La mención de Leung del sufragio universal se refiere a los nuevos acuerdos que permitirán a los votantes emitir una boleta individual, lo que reemplaza el sistema anterior en el que el jefe del Ejecutivo fue elegido por un comité de 1,200 miembros en Beijing.
“En definitiva, es mejor tener (un presidente ejecutivo) elegido por cinco millones de electores que por 1,200 personas. Y es definitivamente mejor emitir un voto en el colegio electoral que quedarse en casa y ver en la televisión mientras los 1,200 miembros del Comité de Elección vota”, dijo Leung.
“Beijing debe escuchar”
Ese resultado no es visto como una solución aceptable para los manifestantes, que dicen que se les prometió el derecho a elegir a sus propios líderes en los términos del acuerdo de traspaso de Gran Bretaña a China, y se oponen a que Beijing conserve la capacidad de vetar candidatos.
Benny Tai, cofundador de uno de los principales movimientos de protesta, dijo a CNN que los manifestantes “no presionan o desafian el estatus soberano de China sobre Hong Kong”.
“Queremos un derecho que debemos disfrutar, nada más y nada menos”, dijo. “Esperamos que los líderes en Beijing sean capaces de escuchar y… responder a las demandas de la gente de Hong Kong”.
Las autoridades han refrendado su respuesta desde el domingo, cuando la policía lanzó 87 bombas de gas lacrimógeno contra la multitud después de que se negaron a las llamadas para dispersarse, lo que incluso generó nuevas protestas.
Grupos pro-Beijing
A pesar de la gran participación en las calles, no todo el mundo en Hong Kong está detrás del movimiento de protesta.
Leung tiene el respaldo de los grupos pro-Beijing como la mayoría silenciosa de Hong Kong, que ha tenido sus propias manifestaciones. Ellos argumentan que los activistas prodemocracia “ponen en peligro a Hong Kong” y crean caos.
Andy Chan, de 57 años, en Causeway Bay, dijo a CNN que pensaba que la democracia debe ir “paso a paso”.
“Hong Kong debería estar estable, todo debe estar estable. Yo no quiero que el mercado de valores o el mercado inmobiliario llegue a un nivel horrible”.
Jethro Mullen, Wilfred Chan, Richard Roth, Chieu Luu, Ashley Fantz y Greg Botelho contribuyeron con este reporte.