Según informó el sargento de la policía Kevin Hughes, el sábado por la mañana el niño se reunió con su madre, quien vive fuera del estado.
Los vecinos le dijeron a WXIA que estaban sorprendidos por los arrestos.
“Eran personas muy agradables, muy abiertas y nos decían que podíamos visitarlos cuando quisiéramos”, le dijo Julie Pizarro, quien vive al otro lado de la calle, a WXIA. “El joven no mostraba ninguna señal de angustia. Supongo que nunca sabes lo que sucede en secreto”.
Según informó la policía, a partir del viernes por la noche llegó dos veces a la casa en Jonesboro para buscar al niño, luego que alguien (la policía no dijo quién) le pidiera que revisara la casa.
Según informó la policía en un comunicado de prensa, los oficiales no encontraron al niño durante la primera visita y varias personas del lugar les dijeron que no tenían información sobre él.
Pero por razones que la policía no explicó de inmediato, al final los oficiales regresaron.
Mientras que la policía estaba buscando en la casa por segunda vez, el niño contactó a su madre por teléfono y ella le dijo a la policía que buscara detrás de una pared falsa, informó WXIA, citando a la policía.
El vecino Akono Ekundayo le dijo a WXIA que tanto él como su esposa siempre habían visto al niño.
“¡Por Dios!, estaba justo bajo nuestras narices. Podríamos haber hecho algo”, dijo Ekundayo. “Pero nunca se le vio angustiado, no lo parecía”.
Las autoridades no dijeron quién de los padres tenía la custodia legal del niño y por qué no se había contactado a la policía antes.