Por Ralph Ellis, Kevin Liptak y Jim Acosta, CNN
CIUDAD DE PANAMÁ (CNN) – El presidente estadounidense Barack Obama saludó a su contraparte cubano Raúl Castro este viernes por la noche antes de la inauguración de la Cumbre de las Américas.
Esto fue histótico. Las dos naciones han tenido muy poco contacto oficial desde hace 50 años.
La reunión fue tan importante que Bernadette Meehan, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, emitió un comunicado: “En la Cumbre de las Américas esta noche, el presidente Obama y el presidente Castro se saludaron y estrecharon sus manos”.
Cuba y Estados Unidos tienen más de medio siglo de enemistad, el cual ha estado plagado de eventos muy traumáticos para la historia moderna de Estados Unidos, como la Crisis de los Misiles, Bahía de Cochinos y la oleada de inmigrantes de la década de 1980.
Ambos líderes anunciaron un acercamiento en diciembre pasado.
Obama habló el miércoles pasado con el líder cubano antes de viajar a Panamá. Ambos estuvieron en una cena este viernes y se espera que estén juntos este sábado en el segundo día de la cumbre.
Obama llegó a Panamá este jueves a una conferencia que siempre estuvo marcada por la exclusión a Cuba. Cuando Obama había descendido del avión presidencial y se trasladaba a su hotel, el avión de Castro aterrizaba en Panamá. Ambas llegadas fueron transmitidas en vivo por la televisión panameña.
Durante la llamada del pasado miércoles, Obama y Castro discutieron el actual proceso de normalización de las relaciones entre Estados Unidos y Cuba. Tenía “sentido” que ambos líderes se comunicaran antes de las reuniones del viernes y el sábado, dijo el asesor de seguridad nacional Ben Rhodes.
La charla telefónica es la de más alto nivel entre Estados Unidos y Cuba desde que el entonces vicepresidente Richard Nixon y el entonces primer ministro Fidel Castro se reunieron en 1959.
En Panamá se espera que Obama anuncie que se quitará a Cuba de la lista de países que patrocinan el terrorismo.