En EEUU se presentaron docenas de casos, hecho que hizo difundir temores vínculo entre las vacunas y el autismo.

(CNN) – La vacuna para el sarampión, las paperas y la rubéola no conlleva un mayor riesgo de desarrollar autismo, según un nuevo estudio realizado en más de 95.000 niños.

El estudio, publicado el martes en la revista Journal of the American Medical Association, es el más reciente trabajo de investigación en desacreditar el mito que vincula a la vacuna SPR con el autismo.

A través de una base de datos de reclamos de un amplio plan de salud comercial, los investigadores le pusieron particular atención a los niños que tenían hermanos mayores con autismo, o ASD, lo cual los coloca en un mayor riesgo genético de desarrollar autismo.

“Encontramos que no había un vínculo perjudicial entre recibir la vacuna SPR y el desarrollo de un trastorno del espectro autista”, dijo Anjali Jain, quien es pediatra en el Lewin Group, una firma de consultoría en el cuidado de la salud ubicada en Virginia, y quien trabajó en el estudio.

‘No hay evidencia’ de que exista un vínculo

El equipo de investigadores examinó los registros de 95.727 niños en una ventana de 11 años. Ellos estudiaron el riesgo de desarrollar autismo en el caso de los niños que recibieron la vacuna SPR en comparación con quienes no la recibieron.

En el caso de los niños cuyos hermanos mayores habían sido diagnosticados con autismo, los autores del estudio dijeron que “no encontraron evidencia en relación a que recibir una o dos dosis de la vacuna SPR estuviera vinculado con un mayor riesgo de desarrollar un trastorno del espectro autista”.

El trabajo fue financiado por el Instituto Nacional de Salud Mental, los Institutos Nacionales de Salud y el Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos.

‘La creencia persiste’

A medida que docenas de casos de sarampión empezaron a surgir en Estados Unidos en meses recientes, nuevamente se presentaron temores infundados respecto a la existencia de un vínculo entre las vacunas y el autismo.

“Aunque muchas investigaciones sugieren que no existe un vínculo entre la vacuna SPR y el trastorno del espectro autista, esas creencias aún persisten”, dijo Jain.

El estudio encontró que los niños que tenían un hermano mayor con autismo tenían menos probabilidades de ser vacunados.

“Sus índices de vacunación eran de más o menos 10% menos en comparación con los niños que no tenían hermanos afectados”, dijo Jain.

El mito recurrente acerca de que existe una relación entre las vacunas y el autismo, propagado por un pequeño pero vocal grupo de activistas antivacunas, surgió a partir de un estudio de 1998 que ha sido desacreditado, el cual fue publicado en una revista británica por un médico que más tarde fue despojado de su licencia.

“Como comunidad científica, no estamos seguros de qué es lo que ocasiona el autismo, pero no son las vacunas”, dijo el mes pasado el Dr. Sanjay Gupta, de CNN.