(CNN) – No lloró, al menos no hasta después. Al contrario: luchó.
La imagen de la escapada casi milagrosa del campeón mundial de surf Mick Fanning tras ser atacado por un tiburón el domingo frente a las costas de Sudáfrica ha dado la vuelta al mundo.
La confrontación fue transmitida en vivo por televisión, y las imágenes de la aleta del tiburón acercándosele por detrás se volvieron virales con una rapidez que no se veía desde el video del músico surcoreano Psy y su “Gagnam Style”.
Fanning, que tiene 34 años, es un surfista australiano que ha ganado tres veces el Tour Mundial de la Asociación de Surfistas Profesionales. El domingo competía en el J-Bay Open, la sexta competencia World Surf League Championship Tour, en la Bahía de Jeffreys, en la provincia oriental del Cabo.
El deportista estaba en el mar con el agua a la altura del pecho cuando una aleta emergió a la superficie y se dirigió hacia él. Pero él no la vio porque estaba de espaldas.
“De repente, sentí que tenía algo detrás”, dijo el lunes a CNN. “De pronto, salté sobre mi tabla y, bueno, algo pasaba”.
‘Me empezó a arrastrar’
El tiburón se enganchó en la cuerda, que conecta la tabla al tobillo del surfista para evitar que se le vaya.
“Sentí que la cuerda me arrastraba hacia abajo”, recordó Fanning. “Y lo siguiente ya fue ver su aleta y me subí a la tabla”.
El deportista dice que cree que el tiburón le golpeó en la cabeza, pero no se acuerda. Y luego se le acercó de nuevo.
“Volví a mi tabla y era o yo o el tiburón”, recordó.
“Creo que intenté golpearle”, dijo. “Y entonces me empezó a arrastrar, tirando de la cuerda. Yo no sabía qué hacer”, contó.
Pero entonces se rompió la cuerda y Fanning empezó a nadar desesperadamente hacia tierra, gritándole a su compañero surfista Julian Wilson que se fuera también hacia la orilla.
Pero Wilson hizo otra cosa.
“Como guerrero y leyenda que es, vino por mí”, declaró Fanning.
Antes de que Wilson pudiera alcanzarle, llegó rápidamente una embarcación de los organizadores y Fanning se trepó. Hundió su cabeza en el suelo de la barca, como si en ese momento cayera en cuenta de lo que le había pasado.
Pero no llegó a darse cuenta plenamente hasta que llegó a la orilla.
‘Lloré un poco’
“No me di verdadera cuenta hasta que llegué aquí y vi lo conmovido que estaba todo el mundo”, dijo a CNN. “Incluso ahora me emociono”.
Y luego habló con su madre, que vio el ataque en vivo por televisión. Le dijo que quiso arrancarlo del agua a través de la pantalla de televisión.
Y luego vino el día después.
“Me desperté esta mañana y hablé con más familiares y amigos; lloré un poco”, dijo. “Nunca sabes. Uno tiene suerte. Das gracias a todos los dioses o quien sea; simplemente das gracias. Gracias por cuidarme”.
A la pregunta de si volvería a hacer surf, recordó que algunos de sus compañeros han sido mordidos por tiburones y han seguido haciéndolo.
Hacer surf, dijo, le da una sensación de equilibrio. Pero aunque no fuera profesional, dijo, siempre lo haría.
“Seguiré haciéndolo. Solo que tendré más cuidado”, comentó. “Volveré, sí”.