(CNN) – Walter Palmer, un dentista de Minnesota, dijo que pensaba que la cacería de leones que pagó en Zimbabwe a principios de este mes estaba adecuadamente organizada.
Pero el león que él y sus guías locales persiguió y mató no era cualquiera.
Era Cecil, uno de los leones más conocidos de África y un importante atractivo turístico para Zimbabwe.
Cecil, que tenía 13 años, era uno de los ejemplares más preciados del Parque Nacional Hwange, donde frecuentemente era avistado por los visitantes. Un video del animal con ojos soñolientos, indiferente y porte real ha sido ampliamente difundido.
Era parte de un estudio que realizaba la Universidad de Oxford y se le había incluso colocado un collar GPS para seguir su rastro.
“No tenía idea de que el león que tomé era un ejemplar conocido y apreciado por los lugareños, que tenía collar y que era parte de un estudio hasta el final de la cacería. Confíe en la experiencia de mis guías profesionales para asegurarme que la caza era legal”, dijo Palmer, en un comunicado el martes.
Un funcionario policial dijo que dos zimbabuenses han sido apresados.
Herido y perseguido por 40 horas
De acuerdo con el recuento de Rodrigues, la muerte de Cecil fue cruel.
Johnny Rodrigues, dirigente del Zimbabwe Conservation Task Force, explicó que el 6 de julio, Bronchorst llevó a Palmer al Parque Nacional Hwange.
“Fueron a cazar por la noche con un reflector y avistaron a Cecil. Ataron un animal muerto a su vehículo para atraerlo y hacerlo salir del parque y cubrieron de olor un área de medio kilómetro de distancia del parque”, dijo Rodrigues.
Agregó que Palmer hirió a Cecil con una flecha y que los dos hombres lo siguieron y lo hallaron unas 40 horas después y lo mataron a tiros.
Se dieron cuenta que tenía un collar GPS y trataron de destruirlo, contó.
Le quitaron la piel y lo decapitaron. Contrario a lo que ha informado anteriormente, la cabeza no ha sido hallada.
“Lo más triste de todo es que Cecil está muerto y que el siguiente león en jerarquía, Jericho, probablemente matará a todos los cachorros de Cecil para que pueda pasar su propia estirpe a las herbras. Es lo que hacen los leones”, dijo Rodrigues.
Un supuesto pago de 50.000 dólares
Los zimbabueneses Honest Trymore Ndlovu y Theo Bronchorst deben comparecer ante una corte el miércoles, de acuerdo con la Autoridad de Manejo de Parques y Vida Salvaje de Zimbabwe y la Asociación de Operadores de Safaris de Zimbabwe. De acuerdo con el comunicado, Bronchorst es un cazador profesional.
Las investigaciones sugieren que el asesinato de Cecil era ilegal porque al propietario de la tierra “no se le asignó un león en su cuota de caza para el 2015”, dijo el comunicado.
“Todas las personas implicadas en este caso deben comparecer ante el tribunal para enfrenta cargos de caza furtiva”.
Funcionarios dijeron que creían que Palmer había pagado entre 50.000 y 55.000 dólares por la caza de un león.
En su comunicado, Palmer dijo que contrató a dos guías profesionales que obtuvieron los permisos adecuados.
“Hasta donde sé, todo en este viaje fue conducido de forma legal y adecuada”, explicó.
Agregó que hasta ahora no ha sido contactado por las autoridades ni de Estados Unidos ni de Zimbabwe, pero que ayudaría en cualquier investigación.
“De nuevo, lamento profundamente que la práctica de una actividad que amo y que realizo responsable y legalmente haya resultado en la muerte de este león”, dijo Palmer.
Torrente de ira
El aparente papel de Palmer en la muerte de Cecil ha traído una enorme ola de ira en internet.
Su página web en Bloomington, Minnesota, fue inundada con comentarios de gente molesta por la caza del león.
“Qué vergüenza, matar a una criatura majestuosa”, escribió un usuario con el nombre de Charmie P.
El sitio web del negocio de Palmer, River Bluff Dental, parecía haber sido cerrada.
Un torrente de indignación fluyó en las redes sociales, con celebridades como Sharon Osbourne censurando al dentista.
“Espero que #WalterPalmer pierde su casa, su práctica y su dinero”, tuiteó Osbourne. “Él ya ha perdido su alma”.
Dentista lamenta el papel que jugó en la muerte de Cecil
El asesinato de Cecil no parece ser la primera vez que Palmer se ha metido en problemas mientras está de cacería.
Un hombre del mismo nombre, edad y de la misma ciudad, mató ilegalmente a un oso negro en Wisconsin hace varios años, de acuerdo con documentos del tribunal.
Ese individuo fue declarado culpable por intencionadamente hacer declaraciones falsas al Servicio de Pesca y Vida Silvestre de Estados Unidos, fue sentenciado a un año de libertad condicional y se le ordenó pagar una multa de casi 3.000 dólares, muestran los registros.
Un artículo del New York Times, publicado en 2009, el cual hablaba de Palmer y sus métodos de caza, decía que había cumplido un año de libertad condicional por el caso de las declaraciones falsas.
Palmer posa (a la derecha) con un ciervo de cola negra muerto. Palmer dijo que lamenta ‘profundamente’ haber matado a Cecil, el león, y que creyó que la caza era legal.
El artículo del Times detalló la habilidad y el entusiasmo de Palmer por usar arcos en lugar de armas de fuego para matar animales.
Se dice que “es capaz de atravesar un naipe desde una distancia de 91 metros con su arco de poleas”, según el artículo, y este hizo referencia al asesinato de un gran alce con una flecha en el Norte de California.
Temor por las crías de Cecil
La muerte de Cecil este mes probablemente tenga un efecto dañino en su camada, dijeron los funcionarios.
“La parte más triste de todo es que, ahora que Cecil está muerto, el siguiente león en la jerarquía, Jericho, probablemente mate a todas las crías de Cecil, para que pueda insertar su propia línea de sangre en las hembras”, dijo la fuerza de conservación de Zimbabue.
“Este es un procedimiento estándar para los leones”, advirtió.
Algo que agrava el problema es que “las hembras de la manada podrían morir tratando de defender a esos cachorros”, dijo Jeff Flocken, el director regional de Norteamérica para el Fondo Internacional para el Bienestar Animal.
Llamados a la prohibición de la práctica de matar animales como trofeos de caza
El asesinato de Cecil ha renovado los llamados entre los activistas para que se dé una prohibición contra matar animales como los leones en África para tenerlos como trofeos de caza.
A primera hora del miércoles, más de 210.000 personas habían firmado una petición en línea que exigía “justicia” para Cecil. La petición hacía un llamado a que el presidente de Zimbabue, Robert Mugabe, deje de emitir permisos de caza para matar a animales en peligro.
Las poblaciones de leones africanos han disminuido en casi un 60% en el transcurso de los últimos 30 años, y tan solo 32.000 de ellos permanecen en su hábitat natural, según el Fondo Internacional para el Bienestar Animal.
Los cazadores argumentan que al pagar grandes cantidades para cazar ciertos animales con el permiso de las autoridades, pueden ayudar a financiar la preservación de especies en peligro de extinción.
Ese es el argumento presentado por Corey Knowlton, un tejano que pagó 350.000 dólares para cazar y matar un rinoceronte negro en Namibia este año.
Investigadores estudiaron los efectos de la caza en el parque de Cecil
Sin embargo, muchos conservacionistas cuestionan el valor de ese enfoque.
“Estudios demuestran que con estas grandes cazas en las que no se escatima el dinero, solo del 3% al 5% del ingreso por esa caza en realidad va destinado a las personas de la zona donde se lleva a cabo la caza”, dijo Flocken.
“Existen formas mucho mejores de generar esta cantidad de dinero; los ingresos por el turismo de naturaleza, donde no matan a los animales, constituyen de tres a 15 veces más que lo que se genera en estas cazas por trofeos en África”, le dijo a CNN.
Los investigadores de la Universidad de Oxford que han estudiado a los leones donde Cecil vivía descubrieron que la caza de trofeos afuera del parque nacional tenía un “impacto alarmante en las cifras y en la estructura de la población de los leones dentro del parque”.
“Cada vez que se elimina un león macho a manos de cazadores en la frontera del parque, se creaba un ‘vacío territorial’ que obligaba a los machos a alejarse de dentro del área protegida hacia áreas fronterizas, donde también se volvían vulnerables a los cazadores”, dijo la universidad.
Una moratoria completa sobre la caza de trofeos alrededor del parque entre 2005 y 2008 coincidió con un incremento del 50% en la población de leones, observaron los investigadores.
La caza de trofeos empezó en 2009, pero con un monitoreo cercano por parte del equipo de investigación de Oxford, las autoridades de Zimbabue y otros grupos a fin de asegurarse de que su impacto en la población de leones fuera sostenible.