(CNN Español) – No había nada que le causara más ilusión a Catalina Vega que la pronta llegada de su primer hijo. Con su esposo Ruben Mejía se preparaba para recibir al pequeño y concretar el gran anhelo de ser padres.
A las 33 semanas de un embarazo de alto riesgo por un lupus que padecía, antes de lo previsto nació Alejandro. Un día después, por las complicaciones, Catalina murió. El pequeño apenas pesaba 1.430 gramos y la necesidad inmediata de la familia era lograr alimentarlo de leche materna como su madre hubiera querido. Casi cinco meses han pasado desde ese 28 de marzo y, como si un ángel desde el cielo se mantuviera vigilante, Alejandro crece lleno de vida y de amor.
La historia de Catalina y su familia motivó a un grupo de mujeres a crear una organización que lleva su nombre: Fundación Banco de Leche Humana Catalina Vega. Antes de eso solo tenían un sitio en Facebook donde compartían consejos e información de venta de artículos para recién nacidos. Con el papá de Alejandro y con su abuelita, Elizabeth Arias, el grupo se organiza para llevar la leche materna al pequeño y no le ha faltado desde ese día.
“El niño estuvo hospitalizado los primeros 20 días, ahí recibía leche del Banco de sangre de San Ramón, pero el problema era al salir del hospital. Nos empiezan a llamar del grupo para donar leche. Y así empezó: entre el papá y yo con el apoyo de amigos y familiares, recogemos la leche en casa de ellas… o ellas la traen”, explica Elizabeth Arias, madre de Catalina.
En Costa Rica solo existe un Banco de Leche ubicado en el Hospital de San Ramón de Alajuela, una provincia aledaña a la capital, San José, lo que complica el acceso para pequeños de otras zonas del país, sobre todo para los que están en riesgo. Para donar se hacen exámenes que verifiquen la salud de la mujer y la leche debe mantenerse en condiciones adecuadas para que no se contamine.
Además de promover la apertura de otros bancos, la fundación busca aumentar el número de mujeres donadoras, dice Melissa Lamparero, una de las fundadoras del grupo.
“Decidimos dar apoyo y ahora queremos que esa posibilidad la tengan las mujeres que por diferentes razones no pueden dar leche materna a sus hijos; queremos que en Costa Rica haya diferentes lugares con las condiciones para donar”, explica Lamparero.
El 7 de agosto pasado, Día Mundial de la Lactancia Materna, la organización hizo entrega de dos extractores al Hospital de la Mujer y, según la fundación, esperan que pronto se convierta en un centro donde las mujeres puedan llegar a donar.
En principio la leche se enviaría a San Ramón, aunque la idea es que en poco tiempo se convierta en el segundo hospital con banco de leche materna del país. Según dijo a CNN la Caja Costarricense de Seguro Social —a la que pertenecen ambos hospitales públicos —la idea es habilitar un tercer Banco de Leche en Heredia, otra provincia aledaña a la capital.