Guatemalan presidential candidate for the National Front Convergence Jimmy Morales shows his inked finger after casting his vote in Mixco, near Guatemala City on October 25, 2015. Guatemalans vote in a presidential run-off choosing between a comedian with no political experience and a former first lady, amid the fallout of a massive corruption scandal. AFP PHOTO / RODRIGO ARANGUA        (Photo credit should read RODRIGO ARANGUA/AFP/Getty Images)
Jimmy Morales de comediante a presidente
02:24 - Fuente: CNN

(CNN Español) – A falta del pronunciamiento oficial del Tribunal Supremo Electoral, Jimmy Morales es el virtual ganador de la elección presidencial en Guatemala.

En la segunda vuelta, Morales, del Frente de Convergencia Nacional (FCN-Nación), derrotó por amplia diferencia a Sandra Torres, de la Unidad Nacional de la Esperanza.

Con el 100 % de las mesas escrutadas, Morales obtuvo el 67,44 % de los votos, frente al 32,56 % de Torres.

Hubo una abstención de 46 %.

En su discurso de victoria, Morales señaló que anunciará su gabinete entre la segunda y tercera semanas de diciembre.

“Guatemala ha demostrado al mundo que en democracia los problemas pueden resolverse”, dijo.

Para Morales, “la segunda vuelta fue ejemplar y la población se presenta con ganas de fortalecer la democracia”.

“Guatemala está cambiando de forma pacífica; sin un fusil, sin una sola bala”.

Por su parte, al reconocer su derrota, Torres le deseó mucha suerte a Morales.

El candidato sorpresa

Morales fue el candidato sorpresa del proceso electoral guatemalteco y, antes de lanzarse a la política en 2011, era actor y comediante.

Con 46 años, se califica como nacionalista y con pensamiento “al centro”. Tiene estudios de administración de empresas y teología. Representa la denominada “antipolítica”.

Su edad, facilidad de palabra y manejo de cámaras y públicos constituyen, según los analistas, muchas de sus fortalezas.

Para la primera vuelta, la campaña de Morales apenas sobrepasó los 200.000 dólares, según consigna el Tribunal Supremo Electoral.

Hasta antes de junio, Morales no figuraba entre los favoritos. Sin embargo, la crisis política desatada por el escándalo de fraude aduanero —que les costó el puesto al presidente Otto Pérez Molina y a la vicepresidenta Roxana Baldetti, quienes se declararon inocentes—, hizo que la población manifestara su desconfianza a lo que denominan los políticos tradicionales.

De ahí en adelante, Morales experimentó un ascenso que culminó con su pase a la segunda ronda electoral por delante de otros favoritos: Manuel Baldizón, Alejandro Simbaldi y Sandra Torres, su contrincante en la segunda vuelta.

Esa subida, para algunos, se debe a que representa la denominada “antipolítica” ante otras opciones.

Mientras algunos recelan de su falta de experiencia política, otros creen que ése es su mayor atractivo.

Esta semana Morales y Torres habían acordado combatir la corrupción a través de un compromiso denominado Alianza Nacional para la Transparencia. La iniciativa, promovida por el contralor general de cuentas del país, establece compromisos para que todas las instituciones públicas trabajen en favor de la transparencia.

Un país en transición tras un gran escándalo de corrupción

De acuerdo con la Oficina del Procurador General y la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG) de la ONU, la ex vicepresidenta Roxana Baldetti, Pérez Molina y un grupo de colaboradores cercanos recibieron sobornos a cambio de la reducción de impuestos para las empresas que deseaban importar productos en Guatemala, una red de defraudación aduanera denominada ‘La Línea’.

Tanto Pérez Molina como Baldetti renunciaron a sus cargos y están detenidos en prisión en medio de procesos judiciales en su contra.

Alejandro Maldonado, asumió la presidencia tras la renuncia de Pérez Molina.

El escándalo estuvo marcado por una serie de movilizaciones ciudadanas que de manera pacífica exigieron durante varias semanas la renuncia de Pérez Molina y sus colaboradores.