El mercado laboral a mediano plazo demandará más programadores e ingenieros con nuevas habilidades enfocado a lo específico, no a lo general.

(CNNExpansión) – En 2030 desaparecerán unos 2.000 millones de empleos, esto significa que muchas actividades dejarán de hacerse de la forma conocida y se demandará otras habilidades de trabajo, señaló Thomas Frey, autor del libro Comunicándose con el futuro.

El mercado buscará gente que cubra especialidades, no generalidades. Por ejemplo, “un perfil atractivo será el ‘maximizador’, es decir, el responsable de lograr que las oportunidades y los procesos en los negocios se aprovechen al máximo”, dijo en entrevista el autor, quien participó como conferencista en el 2º Congreso Internacional de Innovación Educativa, en el Tec de Monterrey, campus Ciudad de México.

Para llegar a esas predicciones laborales, el autor se basa en investigaciones realizadas en el Instituto DaVinci, firma de la que forma parte, y que se especializa en consultoría sobre innovación empresarial.

Otras instituciones coinciden con el pronóstico de pérdida de empleos -como se conocen- para dar paso a más de 100 profesiones nuevas. “Al menos 47% del trabajo en Estados Unidos cambiará en 2034 requiriendo otros perfiles”, señala el informe El futuro de la empleabilidad, elaborado por el departamento de Ingeniería de la Universidad de Oxford, en el que se analizó 702 ocupaciones susceptibles a ser sustituidas por programas informáticos.

Thomas Frey  aseguró que América Latina vivirá el mismo proceso de transformación laboral porque los mercados profesionales son globales y la tecnología generará cambios por igual, aunque en algunas economías lleve más tiempo incorporarlos.

Perfiles del futuro

“Puedo decir que los programadores y los ingenieros serán de los más solicitados en los próximos 5, 10 años y más, por ser perfiles que van con la renovación tecnológica, aunque en el futuro tienes que traer otros skills (habilidades) para emplearte en proyectos innovadores”, mencionó Frey, considerado por Google uno de los conferencistas del futuro mejor posicionado.

El integrante de la Asociación Nacional de Ponentes americanos puso como ejemplo al ingeniero en sistemas computacionales. Este profesional conoce el lenguaje técnico, pero tendrá un valor adicional si entiende sobre drones, pues resulta que en los próximos años “veremos drones a manera de grandes flotillas en universidades y empresas” para rastreo, exploración geográfica, mantener registros en construcciones, dijo el conferencista.

Thomas Frey, y otras instituciones que hablan sobre carreras y empleos en el futuro, parten de aspectos como la relación entre avance tecnológico e ‘informatización’ de actividades laborales. Esto significa que muchas tareas se podrán automatizar, y actualmente lo están haciendo, entonces el mercado laboral sufrirá una transformación porque buscará reclutar y remunerar mejor a quien demuestre “mayor destreza cognitiva” para aprovechar la tecnología, explicó Frey.

Esto es lo que el especialista llama pensamiento 3D, es decir, aprender a resolver problemas “y ver más allá de las condiciones evidentes”, para cumplir una tarea profesional aprovechando los recursos tecnológicos. Ésta, afirmó el autor, será la cualidad más buscada en las empresas, y para desarrollarla tiene que haber un cambio en el pensamiento de los profesionistas: implica más autogestión de carrera y preparación continua, que tomar cursos tradicionales en las empresas.

El futurólogo, quien ha participado en ponencias para la NASA, adelanta que los cambios no serán sólo a nivel laboral, también en universidades. Crecerán los microcréditos que se otorguen a jóvenes para estudiar una carrera a cambio de aspectos más innovadores, como participar de proyectos tecnológicos, y no sólo tener buenas calificaciones, ejemplificó.

El Instituto DaVinci, del cual forma parte Frey, tiene un listado de más 100 perfiles que se demandarán en el futuro en diferentes ámbitos, estos son algunos:

- Especialistas en la creación de simuladores.

- Profesionales de la ética, encargados de crear e implementar estrategias de cómo actuar ante diversos escenarios.

- Contextualistas de datos, o personas encargas de agrupar información para dar a las empresas argumentos en su toma de decisiones.

- Asesores de impacto corporativo, para medir los riesgos de optar por ciertos proyectos, soluciones o medidas en las empresas.