(CNN)– Un miembro de la tripulación de un crucero en el Caribe murió mientras trabajaba en un ascensor a bordo, dijo la compañía.
Los pasajeros a bordo del Carnival Ecstasy fueron testigos de una muerte horrorosa en la noche del domingo en que vieron cómo sangre se derramaba en el frente de un ascensor.
Matt Davis y su esposa estaban en camino a cenar cuando se toparon con la terrorífica escena.
“Al mirar y ver el ascensor con la sangre cayendo sobre la puerta cubriéndola como una sábana … fue una escena de la vida real sacada de ‘El Resplandor’”, le dijo Davis a WFTX, afiliada de CNN, haciendo referencia a la película e horror de 1980.
“Algo horrible pasó”
Davis y su esposa tomaron fotos y videos de lo que vieron. En una de las tomas que compartieron con WFTX, se puede escuchar a un hombre gritando. “¡No, eso no puede ser! ¡No, eso no es posible!”.
El ascensor eventualmente fue cerrado, afirmó Davis, y frente a él pusieron un letrero que decía: “Lo siento, no estoy funcionando por el momento”.
El hombre afirmó que otros miembros de la tripulación le dijeron que un electricista había estado trabajando en el ascensor.
“Alguien estaba adentro o detrás de esa pared cuando el ascensor descendió, y no sé exactamente qué sucedió, pero algo horrible pasó”, le dijo Davis a WFTX.
Un vocero de la línea de cruceros, Vance Gulliksen, le dijo a CNN que un miembro de la tripulación murió el domingo en el barco mientras trabajaba en un ascensor.
“La compañía extiende sus condolencias a los familiares y seres queridos del miembro de nuestro equipo”, dijo Gulliksen este miércoles y añadió que les estaban prestado apoyo.
“Las autoridades apropiadas han sido notificadas y se puso en marcha una investigación sobre la causa del accidente”, añadió. El barco estaba en la fase final del crucero de tres días que partió desde Miami cuando se presentó este hecho.
Aunque Gulliksen no dio el nombre del empleado que murió, la Policía de Miami lo identificó como José Sandoval Opazo, de 66 años, un electricista del crucero.
Carnival Corporation, la empresa dueña de la línea de cruceros, ha experimentado varios problemas en sus barcos en los últimos años, incluyendo el caso del Costa Concordia, que se volcó en la costa de Italia en 2012 y un incendio en el crucero Carnival Triumph en 2013.
Carnival Corporation, which owns the cruise line, has experienced a number high-profile problems on its ships in recent years, including the capsizing of the Costa Concordia off the coast of Italy in 2012 and a crippling fire on the Carnival Triumph in 2013.