Una réplica del Ángel de la Independencia exhibida en la Plaza de la Constitución de la Ciudad de México, el 25 de julio de 2008.

(CNNExpansión) — Cuando el Distrito Federal cambie de nombre oficialmente a la Ciudad de México, ¿cómo se le dirá a las personas oriundas de la capital mexicana?

El miércoles pasado, la Comisión Permanente del Congreso mexicano declaró constitucional la reforma política del Distrito Federal, por lo que pasó al titular del Ejecutivo para su publicación.

Con ello, se dio un paso más para el cambio de estatus constitucional del D.F., que será la Ciudad de México.

Y ahí es donde entra la duda de cómo se les dirá a quienes nazcan en la capital mexicana.

Esta incógnita parece haber sido respondida, o al menos sugerida: mexiqueño/na, de acuerdo a la edición 2001 del Diccionario de la Real Academia Española (DRAE).

La Real Academia Española define al mexiqueño como una persona, “natural de México, capital de la República mexicana; perteneciente o relativo a México o a los mexiqueños”.

Así lo refiere el libro “Minucias del lenguaje”, del doctor en lingüística José G. Moreno de Alba (1940-2013), publicada por el Fondo de Cultura Económica (FCE) y disponible en la página electrónica de la Academia Mexicana de la Lengua.

Para el académico, el gentilicio mexiqueño está bien formado, pues a la raíz mexic- se añade el sufijo -eño que, entre otros derivados, también forma numerosos gentilicios (acapulqueño, toluqueño, caribeño…).

“El problema que yo veo no está, entonces, en una morfología defectuosa. No me convence empero el vocablo por la sencilla razón de que, en mi opinión, nadie lo usa. Nunca he oído en boca de un mexicano o de un hispanohablante el adjetivo mexiqueño. Tampoco lo he visto escrito, excepción hecha de los diccionarios mencionados”, escribió José Moreno de Alba.

El lingüista mexicano se pregunta en “Minucias del lenguaje” el motivo por el que se utiliza mexiqueño, e indica que la Academia Mexicana de la Lengua, al percatarse de la inexistencia de un gentilicio referido a la Ciudad de México, lo propuso a la RAE y ésta lo incorporó en su diccionario de 2001.

“La propuesta, en sí misma, no es mala. Sin embargo, si pasados cinco años, la voz no parece haber tenido éxito, resultaría mejor suprimirla”, destacó en su momento el académico mexicano.

Ya han pasado más de cinco años, 15 para ser exactos, y el término mexiqueño parece no haber ganado popularidad.

El defeño, ¿una opción?

Si bien la capital de México dejará de llamarse Distrito Federal, hay que recordar que ya hay un gentilicio para los nacidos en la sede de los Poderes de la Unión: el gentilicio defeño (‘natural de la ciudad de México o del D.F. o ‘perteneciente o relativo a esta ciudad, capital de México’) apareció por primera vez en un diccionario académico en 2001.

En el mismo DRAE se explica que procede “del deletreo de la sigla D. F., Distrito Federal”. En el español mexicano es muy frecuente sustituir la frase Distrito Federal, por el casi bisílabo Deefe o por las simples dos sílabas del vocablo Defe, refirió José G. Moreno de Alba.

El sufijo gentilicio -eño se une a esta raíz: Defe + -eño = defeño.

“No falta quien opina que tiene algún resabio peyorativo. Sin embargo, cuando he preguntado sobre esto a varias personas oriundas del Distrito Federal me han dicho que no sienten de ninguna manera ofensiva esa designación. Algunos me han informado que la consideran más propia de la lengua coloquial, del lenguaje hablado, que de la literatura o de la lengua escrita”, destaca el lingüista mexicano.

En “Minucias del lenguaje”, José G. Moreno de Alba propuso suprimir del DRAE la voz mexiqueño, “porque no hay prueba alguna de que comience a ser empleada por los hablantes (mexicanos o de cualquier otra parte); creo que defeño debe permanecer, ya que, aunque todavía no cuenta con una aceptación plena, su uso, en el español hablado y escrito en México, es evidente”, concluyó el académico.

Una vez que la declaratoria de constitucionalidad (que cambiará el Distrito Federal a la Ciudad de México) sea publicada en el Diario Oficial de la Federación por el Gobierno de la República, el Instituto Nacional Electoral tendrá 15 días de margen para lanzar la convocatoria destinada a conformar la Asamblea Constituyente.

Esta asamblea será la responsable de redactar la Constitución bajo la cual se regirá el Gobierno de la Ciudad de México a partir de 2018, y podrá determinar el gentilicio.