Un sirio muestra las marcas de tortura en su espalda luego de ser liberado por fuerzas del régimen en la ciudad de Aleppo en agosto de 2012 (AFP/Getty Images/Archivo).

(CNN) – Ellos fueron prisioneros de guerra en distintas partes de un conflicto que se ha llevado a cabo durante casi cinco años. Pero todos enfrentaron a una realidad horrenda, de acuerdo con un nuevo informe sobre Siria publicado por las Naciones Unidas.

Tortura, ejecuciones masivas y otros crímenes de guerra se han llevado a cabo en contra de los detenidos en manos de grupos de prácticamente todos los lados del conflicto, según el informe publicado el lunes por la Comisión de las Naciones Unidas de Investigación sobre Siria.

El gobierno sirio, grupos antigubernamentales y grupos terroristas armados, entre ellos ISIS y el Frente Al Nusra (la afiliada siria a Al Qaeda), cometieron asesinatos, violaciones u otras formas de violencia sexual, tortura, encarcelamiento, desaparición forzada y otros actos de manera sistemática, según el informe.

‘Tortura y trato inhumano’

El informe, “Out of Sight, Out of Mind: Deaths in Detention in the Syrian Arab Republic”, cita entrevistas con más de 200 exdetenidos y cientos de familiares, funcionarios militares y guardias que estuvieron presentes durante las muertes de los detenidos. También cita entrevistas con familiares que dijeron que funcionarios del gobierno les habían informado que el detenido había muerto.

Los que sobrevivieron describieron las duras condiciones del cautiverio.

Casi todos los exdetenidos describieron haber sido víctimas y testigos de tortura y de un trato inhumano, dice el informe. Sus compañeros de celda fueron golpeados hasta la muerte durante los interrogatorios o simplemente murieron como consecuencia de la falta de alimentos, el agua sucia e insuficiente o por la falta de atención médica, según el informe.

“Casi todos los detenidos que sobrevivieron han salido en libertad después de haber sufrido abusos inimaginables”, dijo Paulo Pinheiro, presidente de la Comisión de Investigación sobre Siria. “Para los sirios comunes y corrientes, el espectro del arresto o el secuestro, y los horrores casi inevitables que siguen han paralizado a las comunidades en todo el país”.

‘Ejecuciones sistemáticas’

A medida que los grupos armados y las organizaciones terroristas tomaron el control de los territorios en Siria, ellos también mantenían presos en condiciones brutales y los detenidos eran ejecutados sistemáticamente luego de juicios ilícitos, según el informe. En las ciudades de Homs, Idlib y Daraa, el Frente al Nusra y los grupos armados formaron tribunales improvisados de la ley sharia donde procesaban a los detenidos y luego ejecutaban o torturaban a sus oprimidos.

Los centros de detención operados por ISIS también involucraron a combatientes extranjeros y abarcaban varias regiones a lo largo de Siria. De igual forma, estos llevaban a cabo la tortura y el asesinato de sus detenidos, dice el informe. En estos centros de detención, periodistas, activistas y civiles que se consideraba, violaban los decretos de ISIS, eran sujetos a una privación ilegal de la libertad, tortura y maltrato, según la comisión.

El informe, el cual no ha sido confirmado de manera independiente por CNN, detalla el relato de primera mano de un exdetenido de ISIS que dijo haber sido testigo de un hombre de 27 años que fue sacado de su celda, y cuyos gritos se escucharon cuando lo golpearon con una barra de metal. Cuando lo regresaron a su celda, dice el informe, el hombre sacaba espuma de la boca. Cuando sus compañeros de celda pidieron atención médica, los guardias supuestamente dijeron “déjenlo que se sofoque”. El hombre murió poco después, según el informe.

En su declaración al momento de publicar el informe, la comisión dijo que esperaba que el Consejo de Seguridad de la ONU adopte nuevas leyes y sanciones en contra de los responsables de las atrocidades cometidas en contra de los detenidos sirios.

La comisión dijo que las muertes de las personas que se encuentran en custodia siguen ocurriendo en centros de detención en todas partes de Siria en una discreción casi absoluta, lejos de la vista del público. Añadió que el gobierno sirio constantemente niega que las Naciones Unidas y otras organizaciones de control de los derechos humanos tengan acceso al país para documentar adecuadamente el número total de civiles que han muerto en el conflicto.