Nota del editor: Julian Zelizer es profesor de Historia y Asuntos Públicos en la Universidad de Princeton y miembro de la New America. Es el autor de Jimmy Carter y La urgencia feroz de ahora: Lyndon Johnson, el Congreso, y la batalla por la Gran Sociedad. Las opiniones expresadas en este comentario son suyas.
(CNN) ― Este martes está a punto de ser la noche más importante desde el supermartes del 1 de marzo en la configuración de la dinámica de la carrera presidencial para ambos partidos.
De hecho, con un menor número de candidatos en la competencia, y con cada candidato habiendo demostrado sus habilidades electorales, el próximo ganador que logre llevarse todo en los estados de Florida y Ohio podría tener un impacto importante en lo que sucederá en las semanas previas a la convención.
Aquí están las cuatro preguntas clave que las contiendas de la noche del martes en Florida, Illinois, Missouri, Carolina del Norte, Islas Marianas del Norte y Ohio responderán:
1. ¿Donald Trump y Ted Cruz exprimirán a Marco Rubio en Florida?
Cruz centró parte de su energía en hacer campaña en Florida con el objetivo de eliminar a Rubio, el candidato más tremendamente establisment en el pelotón, pero Trump tiene una muy buena oportunidad de tomar este grupo de delegados.
El empresario se mantiene por delante en las encuestas. Una derrota de Rubio en su estado natal de Florida mataría su campaña, un resultado que también sería bueno para Cruz, que probablemente recogería gran parte del apoyo de Rubio.
2. ¿Donald Trump demostrará su afirmación de coalición?
A lo largo de las últimas semanas, Trump ha presionado contra las cuerdas a los partidarios de Cruz, diciendo que él es el único candidato de los dos que lo haría bien en las elecciones generales. A diferencia de la solidez de derecha Cruz, Trump argumenta que solo él podría atraer a una amplia coalición política y ganar en los estados del norte. En Michigan, Trump ha proporcionado algunas pruebas para apoyar su afirmación, pero Ohio y Florida serían la evidencia más poderosa.
Si Trump puede ganar por márgenes significativos en estos estados oscilantes, esto sería crucial para la elección general y tendría algunos datos más significativos para respaldar su argumento principal.
Además, sería uno de los tres únicos republicanos en las últimas décadas que barra con el Sur Profundo en medio de una primaria impugnada (George W. Bush y Ronald Reagan fueron los otros dos que lo lograron). La coalición anti-Trump dentro del GOP, por su parte, tendría mayor dificultada para integrar un apoyo para cualquier candidato establishment como John Kasich o incluso Cruz.
Una cuestión pendiente para el martes es cómo la violencia y el caos que se desarrollaron este fin de semana afectan a las percepciones del favorito. ¿Se unirán a los argumentos anti-Trump que advierten sobre su candidatura es peligrosa, racista e ilegítima? ¿O es que alimentan su narrativa, y la de sus partidarios, de un insurgente que pelea con uñas y dientes para desafiar a los actores políticos poderosos que están dispuestos a hacer todo lo necesario para detenerlo?
3. ¿Kasich será el último candidato establishment de pie?
Este es un momento importante para Kasich, que ha apostado hasta la camisa en el hecho de que puede ganar en Ohio, donde ha sido un gobernador muy popular. El problema es que Ohio se ha ido inclinando hacia Trump.
Aún así, este es un estado en el que Kasich realmente puede mostrar un poco de músculo, y si puede sacar una victoria, y si pierde Rubio en Florida, surgiría como el candidato más fuerte además de Cruz en desafiar Trump. Y con una victoria en este estado clave, donde las preocupaciones económicas ocupan un lugar preponderante, podría ser la persona mejor posicionada en una convención abierta para tomar la candidatura de Trump.
Por otro lado, si pierde en Ohio, sería devastador para sus posibilidades de seguir siendo viable en la campaña.
4. ¿Cuánto afectará a Hillary Clinton la inquietud económica en las elecciones generales?
Aún con todo su éxito hasta el momento, la capacidad de Bernie Sanders para ganar una elección general sigue sin ser clara por decir lo menos. Pero con una serie de importantes victorias primarias ―Michigan, Kansas, Maine― las probabilidades han mejorado que ha sido capaz de continuar su campaña profundamente en las primarias, y siguen siendo una fuerza vital en la convención.
Si bien es cierto que Sanders es esencialmente un candidato de un solo tema, el hecho es que la economía es un gran problema y momento decisivo que afecta a todos los segmentos del electorado, y muchos expresaron su profunda preocupación por sus perspectivas económicas. Mientras tanto, uno de los resultados más notables de Michigan fue que Clinton no lo hizo tan bien con los votantes afroestadounidenses como se esperaba, lo que sugiere que, al igual que muchos estadounidenses blancos, están frustrados y temerosos acerca de su situación.
Aun suponiendo que Clinton gana la candidatura, el éxito de Sanders ha puesto de relieve cuán inseguros sobre el futuro se sienten muchos de los estadounidenses, incluso en estados donde se espera que lo haga tan bien como cualquier demócrata, así como en algunos estados clave.
Es evidente que muchos votantes no están especialmente entusiasmados con las soluciones que propone a los problemas que enfrentan. Con esto en mente, el mensaje antisistema de Trump y la marca podrían resultar atractivos para muchos votantes. Además, también existe la posibilidad significativa de que se sofoque el entusiasmo de los votantes en las primarias demócratas antes de la carrera presidencial, mientras Trump podría impulsar energía para que sus partidarios salgan.
Por supuesto, si Clinton puede ganar Florida y Ohio, ella daría un golpe devastador a la campaña Sanders. Sí, él sin duda podría seguir adelante, pero ella definitivamente el impulso que necesita para aumentar significativamente sus posibilidades en los estados del norte.
Pase lo que pase martes será un día grande para los dos partidos y sus candidatos. Y, con los votantes en estos estados extremadamente importantes e indecisos que tomarán algunas decisiones clave sobre quién debe y quién no debe tener un camino a la victoria, los escenarios para los punteros de cada partido deben ser mucho más claros en el momento en que cierren las urnas.