Nota del editor: Carlos Ariel Sánchez Torres es abogado colombiano y doctor en Derecho de la Universidad de Navarra con estudios posdoctorales en Derecho Público Comparado en el Istituto di Studi Europei de la Universidad de Turín. Ha sido decano de la Facultad de Ciencias Políticas y Administrativas de la ESAP, Magistrado del Tribunal Administrativo de Cundinamarca, Director Editorial de LEGIS S.A, Contralor de Bogotá, Consejero y Presidente del Consejo Nacional Electoral y Registrador Nacional del Estado Civil de Colombia. Las opiniones expresadas en este comentario corresponden exclusivamente a su autor.
(CNN Español) – Aunque el Censo Electoral Colombiano tiene 34.899.9451 ciudadanos habilitados para votar, fueron pocos los que decidieron el resultado del plebiscito del pasado 2 de octubre. En efecto, participó el 37,43% del censo electoral para un total de 13.066.047 votos de más de 34 millones habilitados, siendo el total de votos válidos de 12.808.858, el de votos nulos 170.946 y el de votos no marcados 86.243. Finalmente, el triunfo lo dieron 6.431.376 votos, que votaron por el no, equivalentes a 50,21% de la votación válida, aproximadamente el 18,42 % del censo electoral.
¿Por qué no votaron masivamente los colombianos el pasado 2 de octubre? Lo primero que hay que señalar es que el voto en Colombia no es obligatorio. El autor André Blais, un reconocido profesor de la Universidad de Montreal, se pregunta por qué la gente decide voluntariamente votar en lugar de abstenerse y señala cuatro grandes factores: a) Si se percibe que los beneficios son mayores a los costos ( expectativa de apoyo de las maquinarias electorales); 2) Se sienten obligados por el criterio que el “buen ciudadano debe votar ” (el dilema sobre el sí o no a los acuerdos de paz; 3) Se motivan como parte de un grupo (Ser víctima del conflicto); o 4) Tienen interés particular en la elección (No aplica al plebiscito donde no hay candidatos).
De estos móviles para votar, en una elección sin candidatos, solo el del 2 y el 3 pueden señalarse.
Pese a ello, en todo caso mejoró la participación frente a las del referendo del 2003, único antecedente de un Mecanismo Nacional de Participación Ciudadana Directa, en lo que va corrido de este siglo, en el cual la única pregunta que superó el umbral del 25% del censo electoral, fue la pregunta No. 1, que obtuvo 6.293.807 votos equivalentes al 25,11% del censo electoral para esa elección.
En este plebiscito participó el 37,43 % del censo electoral, es decir un 49% más de participación porcentual que en el 2003 y seguramente influyó que se estableció un umbral de aprobación del 13% del censo electoral para cualquiera de las dos opciones.
Visto así, se pueden comparar algunas cifras tomando como base la votación de la segunda vuelta presidencial en el 2014 donde la participación total frente al censo electoral, incluyendo votos nulos y no marcados, fue del 50,75%, alcanzando los válidos el 47,89% de dicho censo y comentar en torno a posibles razones de abstención.
En el plebiscito del 2 de octubre de 2016, el país votó en un 17,28% menos que en la segunda vuelta presidencial del 2014. Los departamentos con menor votación frente a este rango en el plebiscito, con respecto a la segunda vuelta presidencial, fueron los de la Costa Atlántica: Magdalena (42,68%), Atlántico (38,55%), Córdoba (36,80%), Guajira (36,18%), Bolívar (35,16%), Sucre (32,37%) y Cesar (27,78%).
Mucho de esta abstención se achaca a la tormenta Matthew que asoló la zona especialmente el sábado primero de octubre y el domingo después, día de elecciones. Si la zona Caribe hubiese votado igual que el promedio del país (17,28%), las votaciones hubiesen sumado 2.301.287 votos y no 1.962.216, lo cual reflejaría un incremento total de 339.936 votos y proyectando la tendencia al sí, hubiese obtenido en esa zona 63.251 votos más.
Pero hubo departamentos especialmente de la zona Andina y de los valles interandinos (Cauca y Magdalena) con mayor votación que el promedio del país en el plebiscito con respecto a la segunda vuelta presidencial y fueron Norte de Santander (7,65%), Meta (7,91%), Casanare (8,61%), Valle (11,39%), Santander (13,83%), Cundinamarca (14,60%), Bogotá (2.15%) y Antioquia (14.79%), y de la Costa Pacífica: Chocó (1.90%), departamento muy afectado por el conflicto armado.
Indudablemente el comportamiento electoral del plebiscito del 2 de octubre estuvo marcado por el comportamiento de la segunda vuelta presidencial, el dilema de sí o no a los diálogos a o acuerdos de paz, que el reciente plebiscito no resolvió. Es así como en Bogotá, la capital del país, en valores absolutos subió el número de votos entre la segunda vuelta y el plebiscito comparando las votaciones de la segunda vuelta presidencial de Juan Manuel Santos (1.337.349) y el sí del plebiscito (1.423612) y en los mismos eventos electorales de Oscar Iván Zuluaga (1.075.638) y el no del plebiscito (1.114.612).