Nota del editor: Alejandra Oraa es conductora de Café CNN de CNN en Español. Es portavoz para América Latina y el Caribe del movimiento “Pinta tu mundo de naranja” de ONU Mujeres, que busca luchar contra la violencia de género. Las opiniones expresadas en este artículo corresponden exclusivamente a Alejandra Oraa.
(CNN Español) – Es difícil ser mujer en América Latina. Vivimos en una región donde la base de su cultura (que sigue siendo machista) es protagonista de una infinidad de injusticias alrededor del tema de la igualdad. Roles sociales que determinan lo que podemos o no podemos hacer con base a nuestro sexo.
Romper este paradigma ha dado un resultado vergonzoso: en Latinoamérica se matan o agreden a más mujeres que en el resto del mundo, según cifras de ONU Mujeres: 14 de los 25 países del mundo con las tasas más elevadas de feminicidio están en América Latina y Caribe y 1 de cada 3 mujeres mayores de 15 años ha sufrido violencia sexual, según estimaciones de la agencia de Naciones Unidas. ¿La razón? Sólo el hecho de ser mujer.
¿Cuántas veces hemos escuchado a alguien preguntar qué tenía puesto una mujer víctima de violación? ¿Cuántas sobre qué fue lo que le dijo a su pareja para provocar una agresión física o emocional? Y mujeres, si queremos salir al mundo laboral, la primera barrera que encontramos es la social, incluso entre la gente más cercana.
El feminicidio es el último hecho de una cantidad de acciones previas que ignoramos, porque se piensa que “esa agresión emocional o física, no es nuestro problema”.
Este año Latinoamérica despertó ante la injusticia. Las cifras que conocimos gracias a marchas como “Ni una menos” han creado un liderazgo sin igual. ¿Por qué soy portavoz de este movimiento? Porque quiero que cada paso que las mujeres han tomado en las calles no quede en vano. Porque quiero que sean pasos de gigante que creen grandes acciones. Porque quiero que que el movimiento en contra de la violencia trascienda de género y sea visto como un derecho humano fundamental. Porque creo en el poder de la palabra y en gente como tú y como yo, que somos mucho más que una cifra que pronto desaparecerá.