(CNN) – Las autoridades de Beijing han decidido luchar contra el constante problema de polución de la ciudad con la creación de un cuerpo de policía ambiental, según reportaron los medios estatales.
Ordenada por el alcalde en funciones Cai Qi, esta severa medida política para luchar contra la utilización de combustibles fósiles llega en medio de una gran preocupación por la contaminación atmosférica del país. Y les da algo de alivio a los habitantes de la capital de China, en un lunes con cielos azules y visibles y niveles de calidad del aire que vuelven a ser “buenos”, tras una semana de mucha contaminación.
Policías de la polución
“Como muchos de nosotros, estoy acostumbrado a revisar el estado del clima y el índice de calidad del aire de Beijing muy temprano en la mañana. Entiendo completamente la preocupación de la gente y las quejas por la contaminación del aire”, les dijo Cai a los reporteros el sábado pasado, según la agencia de noticias Xinhua.
Prometió tomar duras medidas para mejorar la calidad del aire en los 16 distritos de la ciudad durante 2017.
Entre otras funciones, la nueva policía ambiental tendrá que sancionar los asados al aire libre, la incineración de basuras y la quema de biomasa, acciones anteriormente ignoradas por las autoridades, reportó Xinhua.
“Los asados al aire libre, la incineración de basuras y la quema de biomasa son actos que no cumplen con las regulaciones y que son el resultado de una supervisión negligente y de una aplicación de la ley muy débil”, dijo Cai.
Lo que no comentó, sin embargo, es cuándo comenzará a operar el nuevo programa.
Alerta roja
La semana pasada, cerca de 24 ciudades en toda China fueron puestas en “alerta roja”, según Xinhua. La alerta roja es el más alto de los cuatro niveles del sistema de alertas de contaminación que se usa en la China continental.
Cuando se activa una alerta roja las autoridades toman medidas como reducir la contaminación del aire cerrando negocios y fábricas y prohibiendo la circulación de vehículos altamente contaminantes.
China ha tratado de aplicar mano dura con los infractores que contribuyen a que aumenten los niveles de contaminación, pero el cumplimiento de esas regulaciones sigue siendo un gran desafío para las autoridades.
El Ministerio de Protección del Medio Ambiente ha castigado a más de 500 compañías chinas y a casi 10.000 dueños de vehículos por presuntas violaciones de las normas medioambientales, de acuerdo con Xinhua.
China les ha exigido a 2.682 funcionarios estatales que rindan cuentas por fallar en la aplicación de las medidas que luchan contra la contaminación y se han impuesto multas cercanas a los 35 millones de dólares, según la agencia de noticias.
Julia Jones, Jennifer Deaton y Josh Berlinger contribuyeron con esta información.