(CNN) – La Casa Blanca el lunes se echó para atrás en un punto clave de la acusación infundada del presidente de EE.UU. Donald Trump de que el entonces presidente Barack Obama escuchó sus teléfonos en la Torre Trump durante las elecciones de 2016.
El secretario de prensa de la Casa Blanca, Sean Spicer, dijo que Trump no estaba refiriéndose a escuchas telefónicas cuando hablaba sobre las escuchas telefónicas.
“Creo que no hay duda de que la administración Obama… que había acciones de vigilancia y otras actividades que ocurrieron en las elecciones de 2016”, dijo Spicer. “El presidente usó la palabra wiretaps (escuchas telefónicas) entre comillas para significar, de forma más amplia, vigilancia y otras actividades”.
En inglés, wiretap o la escucha telefónica es una actividad de vigilancia estrechamente definida que implica intervenir “un cable de teléfono o telegrama para obtener información”, según el diccionario Merriam-Webster.
Spicer también dijo que Trump estaba refiriéndose al gobierno de Obama en un sentido amplio —y no acusando a Obama de un involucramiento personal— cuando tuiteó que “Obama tenía mis ‘cables telefónicos intervenidos’ en la Torre Trump” y cuando acusó a Obama de ser un “malo” o ” un tipo enfermo “.
Los comentarios de Spicer llegan el mismo día en que se cumple el plazo para que el Departamento de Justicia presente evidencia al Comité de Inteligencia de la Cámara para respaldar la acusación de Trump. Hasta la fecha, la Casa Blanca se ha negado a proporcionar evidencia, y numerosos exfuncionarios han negado la existencia de cualquier orden judicial para interceptar la Torre Trump.
Una semana antes, Spicer dijo que el tuit de Trump “habla por sí mismo” y se negó a dar más explicaciones.
Pero el lunes, Spicer estuvo dispuesto a dar una interpretación a los tuits de Trump, diciendo que el presidente le dijo que se refería a medios de vigilancia más allá de las escuchas telefónicas en esos tuits en los que acusa a Obama de hacer precisamente eso.
Pero en cada uno de los cuatro tuits que Trump publicó con su acusación, el presidente se refirió específicamente a escuchas telefónicas, y sólo usó comillas en dos de ellos.
“Terrible! Me acabo de enterar de que Obama tenía mis ‘wires tapped’ en Trump Tower justo antes de la victoria”, dijo Trump en su primer tuit.
“¿Es legal que un presidente haga “wire tapping” una contienda a la presidencia?”, preguntó en el siguiente.
Luego, Trump tuiteó que Obama “estuvo interviniendo mis teléfonos en octubre” y se había inclinado “a intervenir mis teléfonos durante el muy sagrado proceso electoral”.
Pero Spicer no fue el único funcionario de la Casa Blanca que ofreció una definición alternativa de la palabra “escucha telefónica” a pesar del lenguaje claro de Trump.
La consejera de la Casa Blanca Kellyanne Conway también se refirió a las acusaciones de escuchas telefónicas en una entrevista el domingo con el Bergen County Record, sugiriendo que otros métodos de vigilancia encubierta utilizados por la CIA —como reveló Wikileaks la semana pasada— podrían haber sido utilizados en la Torre Trump por el gobierno de Obama.
“¿Sabes si (los teléfonos de) la Torre Trump fueron escuchados?” le preguntó el columnista Mike Kelly a Conway el domingo.
“Lo que puedo decir es que hay muchas formas de vigilancia”, dijo Conway, antes de sugerir que la vigilancia podría tener lugar a través de teléfonos, televisores o “microondas que se convierten en cámaras”.