(CNN) – Jared Kushner, uno de los asesores más cercanos del presidente de Estados Unidos Donald Trump y quien también es su yerno, se ofreció testificar ante los senadores que investigan los supuestos vínculos entre la campaña de Trump y los funcionarios rusos. Kushner tuvo un papel clave a la hora de organizar reuniones entre los principales asesores de la candidatura y el embajador ruso en Estados Unidos Sergey Kislyak.
Este lunes, la Casa Blanca insistió en que las reuniones de Kushner fueron apropiadas, dado su amplio perfil durante la campaña y la transición del nuevo gobierno.
“Durante toda la campaña y la transición, Jared Kushner fungió como el principal punto de contacto con los gobiernos y funcionarios extranjeros. Dado su papel, él se ha ofrecido a hablar con la Comisión (de Inteligencia del Senado) presidida por (Richard) Burr, pero aún no ha recibido la confirmación”, le informó a CNN un portavoz de la Casa Blanca.
La Comisión de Inteligencia del Senado publicó una declaración de Burr y el vicepresidente del grupo, Mark Warner, afirmando que estaban al tanto de la oferta de Kushner. También indicaron que los detalles todavía estaban por definir.
“El momento para el testimonio del señor Kushner aún se está decidiendo, pero sólo se realizará después de que la comisión determine que ha recibido los documentos o la información necesaria para asegurarse de que la reunión es productiva para todas las partes”, explicó el comunicado conjunto.
El diario The New York Times fue el primero en reportar este lunes que Kushner sería requerido para un interrogatorio, debido a su papel en organizar reuniones entre los asesores de campaña y Kislyak, junto con otros líderes extranjeros.
En diciembre pasado, durante la transición presidencial, Kushner se reunió con el embajador ruso en la Torre Trump.
Después de ese encuentro, Kislyak solicitó otra reunión. Sin embargo, en vez de atenderlo él mismo, Kushner envió a su sustituto Avrahm Berkowitz, según lo que confirmó un alto funcionario del gobierno.
Además, Kushner sostuvo una reunión adicional con otra autoridad rusa, de acuerdo a lo que señaló un alto funcionario del gobierno de Trump. Este encuentro fue con Sergey N. Gorkov, el jefe del banco de desarrollo económico de Rusia, ante la insistencia del embajador Kislyak.
La semana pasada, el portavoz de la Casa Blanca Hope Hicks minimizó las reuniones de Kushner con funcionarios rusos, y señaló que Kushner se encontró sólo una vez con Kislyak.
“La única reunión de Jared con el embajador Kislyak fue durante la transición, como se ha informado. Él (Kushner) se reunió con cientos de personas en la campaña y pudo haber intercambiado un apretón de manos con el embajador antes de un discurso del presidente sobre política exterior en abril de 2016”, le afirmó Hicks a CNN el miércoles pasado.
Kushner participó en una amplia gama de asuntos durante la transición presidencial y mantiene un extenso rango de influencia en la Casa Blanca. Bajo ese contexto, sus reuniones con funcionarios rusos pudieron haber sido totalmente apropiadas.
Sin embargo, el escrutinio sobre estas reuniones está aumentando en la medida en que las comisiones de la Cámara de Representantes y el Senado, así como los investigadores del FBI, evalúan el alcance de la intromisión rusa en las elecciones presidenciales de 2016 y los potenciales vínculos que habrían existido entre los socios de Trump y los sospechosos agentes rusos.
La Casa Blanca se ha esforzado por moverse más allá de las preguntas sobre Rusia, en parte porque los contactos entre los socios de Trump y los funcionarios rusos, que no se habían revelado, han salido a la luz repetidamente.
Michael Flynn, antiguo asesor de seguridad nacional de Trump, también asistió a la reunión de diciembre en la Torre Trump con el embajador ruso y Kushner. Flynn fue destituido en febrero pasado, después de engañar a altos funcionarios del gobierno sobre sus contactos con los funcionarios rusos.
Manu Raju y Jeremy Herb contribuyeron a este informe.