Una familia pasó la noche en un refugio temporal en Ayr, Queensland

(CNN) – El ciclón tropical Debbie llegó a la costa noreste de Australia, con vientos sostenidos de 185 kilómetros por hora y con ráfagas que llegan a más de 262 km/h.

La tormenta está azotando la costa de Queensland, con lluvias torrenciales, que podrían causar grandes inundaciones, según la Oficina de Meteorología de Australia.

El ciclón categoría 4 -equivalente a un huracán de categoría 3- persistirá durante las próximas 12 a 24 horas, de acuerdo con los meteorólogos.

El mal tiempo ya se ha cobrado la vida de una mujer de 31 años, en un accidente de coche fatal, el lunes, cerca de la ciudad de Proserpina debido a las malas condiciones climáticas.

El “núcleo muy destructivo” del ciclón ya ha dejado un rastro de caos a su paso por las islas periféricas y cerca de la parte continental, dijo la oficina de Meteorología. Hay advertencias de marejadas de hasta cuatro metros de altura.

El ciclón Debbie ha arrancado árboles de la tierra. Algunos residentes de Queensland informaron que las ventanas de sus apartamentos se rompieron por la tormenta. Playas vírgenes que estaban luminosas y soleadas el lunes se inundaron por completo el martes.

Y Facebook activó su herramienta ‘Safety Check’ para que los usuarios en la región informen a sus amigos y familiares de que están bien.

Los números

En términos de números absolutos, la tormenta es impresionante.

Más de 50.000 personas están sin electricidad en Queensland, informó 7 News.

En el lapso de una hora, cayeron 211 milímetros de lluvia en la zona que golpea el ciclón, dijo la primera ministra de Queensland, Annastacia Palaszczuk.

Aunque las autoridades intentaron evacuar a 25.000 personas antes de la llegada de la tormenta, Palaszczuk dijo a Sky News Australia que el momento de irse ya ha pasado. “Necesito que la gente y las familias se queden en su casa”, agregó.

“Esto va a empeorar”, advirtió Palaszczuk en Nine News Queensland, el martes por la mañana.

El ciclón Debbie es la tormenta más grande que golpea al estado desde el ciclón de categoría 5 Yasi, en 2011, que arrancó casas de sus cimientos y destruyó tierras de cultivo.