(CNN Español) – La primera dama de EE.UU., Melania Trump, entregó este miércoles premios a 13 mujeres distinguidas por sus labores sociales, entre ellas Natalia Ponce de León, víctima del peor ataque con ácido registrado en Colombia.
El Premio Internacional Mujeres con Coraje 2017, un reconocimiento del Departamento de Estado de Estados Unidos, honran a las mujeres de todo el mundo que han superado la injusticia —desde la violencia doméstica hasta el desastre medioambiental— y transformaron sociedades, a menudo poniendo en riesgo su vida. Natalia Ponce de León lidera una fundación que lleva su nombre para defender y proteger a las víctimas de agresiones con ácido.
Un caso emblemático
Natalia Ponce de León fue atacada por Jonathan Vega el 28 de marzo de 2014. El hombre le lanzó ácido sulfúrico al rostro, causándole lesiones muy graves: le quemó la tercera parte de su cuerpo.
El ataque, que quedó registrado en las cámaras de seguridad del edificio en donde vive Ponce de León con su familia, indignó a la sociedad y motivó una campaña, con gran atención mediática, para condenar este tipo de crímenes y visibilizarlos para exigir más justicia. Según la Fundación Natalia Ponce de León, más del 99% de estos casos queda en la impunidad.
Ponce de León, quien ha sido sometida a más de 20 cirugías de reconstrucción, se ha encargado desde su recuperación a hacer públicos los casos de los ataques con ácido y acompañar a los sobrevivientes en los procesos de recuperación y justicia.
El cirujano plástico Jorge Luis Gaviria, encargado de la reconstrucción del rostro de Natalia Ponce de León, contó en el programa ‘Patricia Janiot Presenta: Forjada en ácido’, como fueron las múltiples cirugías a las que se sometió la colombiana tras el ataque.
Vega fue condenado en diciembre de 2016 a 21 años de cárcel.
Gracias al trabajo de Ponce de Léon, en Colombia se impulsó la ley que castiga severamente a quienes lleven a cabo ataques con ácidos.
La ‘Ley de víctimas de ataques con agentes químicos, ácido o sustancias similares’, sancionada en enero de 2016, combina medidas penales, de salud y de integración social para enfrentar esas conductas criminales que han afectado cientos de personas en los últimos años. Además de establecer penas para los agresores aumentarán y eliminar los beneficios para quienes cometan este delito, regula lo concerniente a la ayuda humanitaria, atención, asistencia y reintegración laboral de las personas que sufran la destrucción irreversible de tejido por ataques con agentes químicos y otras quemaduras que generen discapacidad.
“Es un premio para todo Colombia”
En entrevista con Juan Carlos López para ‘Directo USA’, Ponce de León dijo que tras su ataque “renació de las cenizas” y que desde entonces lidera una causa para “inspirar a miles de mujeres para no quedarse en el silencio”.
“Con el apoyo de las instituciones y el amor propio uno puede salir adelante”, dijo la activista.
Ponce de León explicó que si bien son más las mujeres afectadas por los ataques con ácido, hay también muchos hombres que son víctimas de este tipo de agresiones y que no denuncian y cuyos casos no tienen notoriedad.
El proyecto de la fundación es construir una unidad de quemados en Colombia que amplíe la actual operación limitada del Hospital Simón Bolívar en Bogotá para tratar de forma especializada a las personas quemadas de todo el país.
Para Ponce de León, terminar con este tipo de crímenes es una labor que pasa por los medios de comunicación y las familias para erradicar la cultura de la violencia. “Yo me encargué de que esto no quedara como una noticia más”.
En el evento también fue galardonada la peruana Cindy Arlette Contreras Bautista, víctima de violencia por parte de su entonces pareja.
En la ceremonia en el Departamento de Estado, Melania Trump destacó que se debe “dar luz sobre las horrendas atrocidades que ocurren alrededor del mundo”.
“Debemos seguir luchando contra la injusticia en todas sus formas, sea cual sea la escala o forma que adopte en nuestras vidas. Juntos, debemos declarar que la era de permitir la brutalidad contra las mujeres y los niños ha terminado”, agregó la primera dama. “Sus vidas nos recuerdan la capacidad ilimitada del espíritu humano cuando están guiadas por la claridad moral y el deseo de hacer el bien”.
Con información de Fernando Ramos y Betsy Klein