(CNN) – Nuevo Hampshire es el mejor estado para criar a un niño, mientras que Mississippi es el peor, según un informe publicado este martes por la Fundación Annie E. Casey.
El estudio midió datos del 2015 de la privada Oficina de Referencia de Población sobre los temas de bienestar económico, educación, salud y familia y comunidad.
Los mejores estados para el bienestar general del niño fueron Nuevo Hampshire, Massachusetts, Vermont y Minnesota, con Iowa y Connecticut empatados para el quinto lugar.
Los cinco peores estados para el bienestar general del niño fueron Arizona, Nevada, Louisiana, Nuevo México y, al final de la lista por segundo año consecutivo, Mississippi.
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El informe también señaló hallazgos nacionales tales como cómo el número de familias que viven en barrios muy pobres ha aumentado levemente durante el último decenio. En Arizona, Louisiana, Mississippi y Nuevo México, al menos el 20% de los niños vivían en barrios muy pobres en el 2015, como fue el caso del 2010 al 2014, según el informe.
La Fundación Annie E. Casey es un grupo sin ánimo de lucro enfocado en mejorar el bienestar de los niños estadounidenses. Laura Speer, co-directora del estudio y directora asociada de Reforma de Políticas y Defensa de la fundación, dijo que estaba más sorprendida por las mejoras en la tasa de graduación de la escuela secundaria (con un 83% graduándose a tiempo en 2014-2015, un punto porcentual más que el periodo 2012-2013) y la tasa de natalidad adolescente: 22 nacimientos por cada 1.000 niñas en el 2015, frente a 24 en el 2014.
“Habían estado en niveles históricamente buenos, y tanto la tasa de deserción escolar como la de natalidad de adolescentes continuaron cayendo este año”, dijo Speer. “Y ahora están en los niveles más bajos que han estado”.
Los estados que ocupan el lugar más alto en la lista de bienestar infantil tienden a estar en el noreste o en el medio oeste, mientras que los que ocupan el lugar más bajo se encuentran en el sur o suroeste. Speer dijo que una razón importante para estos rankings tenía que ver con el enfoque de cada estado hacia la atención de la salud de los niños.
“Hubo algunos estados en que no se aprovechó la expansión del Medicaid”, aseguró. “No aprovecharon las oportunidades que el gobierno brindó en los últimos cinco años”.
Otros estados tuvieron enormes mejoras en la cobertura de atención de salud infantil. Entre el 2010 y el 2015, California tuvo un 67% de disminución en los niños sin seguro, la más alta en ese período de tiempo. Colorado, Minnesota, Nevada, Nuevo México, Oregón y Carolina del Sur también presentaron descensos de más del 50%, según el informe.
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Speer dijo que las futuras disposiciones en salud podrían tener un impacto en el progreso que se ha hecho en torno a la cobertura de los niños.
“Definitivamente pensamos que las ganancias que hemos logrado a lo largo de los diez o quince años en cubrir a niños y familias están potencialmente en riesgo con las propuestas que han sido discutidas por el presidente y el Congreso”, aseguró. “No hay duda de que habrá repercusiones negativas, especialmente para familias de bajos ingresos”.
El presupuesto propuesto por el presidente Donald Trump reduciría al menos un 20% el Programa de Seguro de Salud para Niños, así como el Medicaid, que cubre a millones de niños más.
“Los niños son casi la mitad de todos los inscritos en el Medicaid, por lo que ellos serían perjudicados de una manera desproporcionada”, aseguró Bruce Lesley, presidente de First Focus, una organización no partidaria de defensa de los niños y las cuestiones de política familiar. “De lo que estamos hablando es de niños pobres o discapacitados, así que realmente están golpeando a los niños más vulnerables de la sociedad”.
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Speer dijo que se siente optimista y espera que los responsables políticos estén pensando profundamente acerca de las implicaciones potenciales de sus decisiones, no sólo en la cobertura del seguro de salud, sino también en los diversos programas estatales que proporcionan apoyo familiar.
“Este no es un momento para dejar perder estas ganancias, debemos estar orgullosos de ellas y debemos mantenerlas”, aseveró. “Tengo la esperanza de que los políticos mantendrán la línea en las ganancias que hemos logrado hasta ahora y tomarán decisiones para proteger a estos niños y sus familias”.