(CNN Español) – El colegio Enrique Rébsamen ha sido el foco de la atención de la cobertura mediática del terremoto en México no solo por el lamentable fallecimiento de más de 20 niños, sino porque durante 36 horas fue el escenario de lo que se mostró como una historia dramática y que terminó siendo falsa: la noticia del rescate de una niña que no existe, la llamada Frida Sofía, y de otros presuntos menores bajo los escombros.
Después de dos días, este jueves la Marina confirmó que “nunca tuvieron conocimiento” de esa versión y que debajo los restos de la escuela no está ningún estudiante (o bien murieron, o están en hospitales o en sus casas) sino, quizá, un adulto que está atrapado y no ha sido rescatado.
En el caso hubo confusión, desinformación y multiplicación de una versión no confirmada. Muchos medios de México y el mundo le hicieron seguimiento al caso, incluyendo CNN, que no obstante siempre se abstuvo de nombrar a la presunta niña debido a la falta de confirmación de la identidad.
En una comunicación pública, Televisa le reclamó al Gobierno por, según ellos, suministrar información incorrecta.
Estas son las imágenes antes y después del terremoto:
El colegio está ubicado en el sur de Ciudad de México.
Estas fueron las primeras imágenes de la escuela justo después del terremoto:
FOTOS | Esta escuela en Ciudad de México quedó destruida por el terremoto
Periodistas de CNN y sus afiliadas han tenido la oportunidad de hablar con menores sobrevivientes, que relataron cómo experimentaron en medio de la angustia los momentos del sismo.
Pánico tras el terremoto
En este video se ve el pánico entre maestras y estudiantes de la escuela Enrique Rébsamen al sur de la Ciudad de México momentos después del terremoto de 7,1 de magnitud. Una parte del plantel colapsó dejando a varias personas atrapadas, entre niños y personal escolar.
Niña sobreviviente: Yo vi cuando se cayó el edificio
Lourdes Prieto, una niña sobreviviente del terremoto en México, recuenta los segundos interminables cuando la tierra tembló en su escuela.
“Pensé que alguien estaba pateándome la silla y la maestra dijo que estaba temblando”
“Todo era polvo y no podíamos ver nada”, dijo una pequeña sobreviviente del terremoto en México.