(CNN) – La Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó con una escasa mayoría una resolución presupuestaria este jueves que despeja el camino para que el Congreso acelere la reforma tributaria.
La votación fue de 216 contra 212, con 20 republicanos que se unieron a los demócratas para oponerse a la medida.
Los republicanos aprobaron el proyecto de ley a pesar de cierta oposición al interior del partido de eliminar la popular Deducción Fiscal Estatal y Local (conocida como SALT por sus siglas en inglés) en el marco de la reforma fiscal.
El presupuesto incluye leyes de reconciliación que le permitirán al Senado aprobar una reforma tributaria con solo una mayoría simple en vez de los 60 votos habituales para superar un obstruccionismo.
El Senado ya aprobó el proyecto de ley, y si bien las reglas de reconciliación irán al escritorio del presidente, el mandatario no firma la resolución del presupuesto.
El presidente Donald Trump, que está impulsando una reforma presupuestaria, tuiteó después del voto: “Grandes noticias, ¡el presupuesto acaba de pasar!”
El marco actual de la reforma tributaria exige la prohibición de las deducciones SALT, una desgravación fiscal utilizada por casi un tercio de los declarantes. Cortar las deducciones ayudaría a los republicanos a recaudar más de un billón de dólares para ayudar a pagar los recortes de impuestos durante 10 años, haciendo de esto una gran fuente de ingresos para su plan general para reformar el código tributario.
Pero los republicanos de estados como Nueva York, New Jersey, Illinois y California, argumentan que sus constituyentes dependen de la deducción. Mientras algunos están abiertos a hacer cambios a SALT —como limitar el nivel de ingresos al que los contribuyentes podrían usarlo— otros no apoyan ninguna clase de compromiso y quieren que los responsables de escribir la reforma dejen SALT la dejen completamente en paz.
“Mi solución es retirarla totalmente de la mesa”, dijo el representante republicano Leonard Lance de Nueva Jersey.
La Cámara aprobó a principios de este mes un presupuesto, pero el Senado hizo algunos cambios cuando lo aprobó la semana pasada y luego lo devolvió a la Cámara.
Uno de esos cambios fue el lenguaje para dirigirse a deducciones como SALT, que es por lo que algunos legisladores —como Lance— decían que se opondrían en el presupuesto incluso si se llegaba a un acuerdo de antemano, algo que no ocurrió. Se estableció que las negociaciones continuarían sobre la deducción en una reunión poco después de la votación.
La deducción fiscal estatal y local fue una de las primeras deducciones que los republicanos anunciaron que serían eliminadas, y el alboroto no se hizo esperar. Se espera que los republicanos de la Cámara revelen el texto de su proyecto de ley la próxima semana, y algunos miembros alertan que habrá una docena más de cambios en el código tributario que molestarán a los miembros de la Cámara y a varios constituyentes.