Washington (CNN) – El exdirector de la campaña de Donald Trump, Paul Manafort, y el también exrepresentante de esa campaña, Rick Gates, se declararon inocentes de los cargos presentados en su contra en el marco de la investigación del fiscal especial del Departamento de Justicia Robert Mueller sobre la injerencia rusa en las elecciones estadounidenses de 2016.
Entretanto, el exasesor de política exterior de Trump, George Papadopoulos, se declaró culpable de mentir al FBI sobre “el tiempo, la extensión y la naturaleza de sus relaciones e interacciones con ciertos extranjeros que él sabía tenían conexiones cercanas con altos funcionarios rusos”, según unos documentos divulgados este lunes.
En un correo electrónico de marzo de 2016, Papadopoulos ofreció organizar una reunión entre funcionarios rusos y miembros de la campaña de Trump en un mensaje titulado: “Reunión con el liderazgo ruso – incluido Putin”, según una fuente.
Gates es socio de negocios de Manafort, con quien trabaja desde mediados de la década de 2000, y fue su mano derecha en la campaña de Trump. Ambos fueron acusados bajo secreto de sumario el viernes y los cargos fueron revelados este lunes, dijo a CNN una fuente próxima al caso.
La acusación contra ambos contiene 12 cargos: conspirar contra EE.UU., conspirar para lavar dinero, no registrarse como agente de una entidad extranjera, proveer información engañosa en documentos sujetos a la Ley de registro de agentes extranjeros en EE.UU., suministrar declaraciones falsas y 7 cargos más de no haber reportado cuentas en bancos del exterior.
Manafort llegó a la oficina del FBI en Washington el lunes por la mañana. Los dos son procesados por separado, según una fuente oficial.
CNN ha tratado de ponerse en contacto con los abogados de Manafort y Gates.
Tras conocerse la noticia del procesamiento de Manafort y Gates, el presidente Trump tuiteó: “lo siento, pero esto pasó hace años, antes de que Paul Manafor formara parte de la campaña de Trump. ¿¿¿Pero por qué son el foco la deshonesta Hillary y los demócratas???”
Previamente, una fuente próxima a la Casa Blanca había dicho que la mala conducta de ambos tiene poco que ver con la campaña de Trump o la investigación sobre Rusia.
“Estos hombres eran malos cuando comenzaron, y eran malos cuando se marcharon”, dijo la fuente.
Sobre los cargos en el auto de procesamiento, la fuente dijo que “no tienen nada que ver con ninguna relación con Rusia” y afirmó que todo esto “no tiene nada que ver” con el presidente Trump.
Nueva etapa
La acusación contra estos altos miembros de la campaña del presidente Trump marca una nueva etapa en la investigación de Mueller por posible colusión entre el gobierno ruso y miembros del equipo de Trump.
Manafort, cuyos trabajos para el expresidente de Ucrania, Viktor Yanukovych, han atraído el escrutinio de los investigadores federales, ha negado hasta el momento haber cometido algún delito financiero por sus pagos relacionados con Ucrania, sus cuentas bancarias en paraísos en el extranjero y sus diversas transacciones inmobiliarias a lo largo de los años.
Son las primeras personas en la órbita de Trump acusadas en la investigación del fiscal especial, que explora si las acciones de Trump relacionadas con el despido del exdirector del FBI James Comey fueron obstrucción a la justicia. Mueller ha adoptado un enfoque amplio en su labor que incluye las transacciones financieras del equipo de Trump.
Antes de la acusación, el FBI allanó la casa de Manafort en Alexandria, Virginia, y confiscó documentos fiscales y financieros, incluidos algunos que ya habían sido entregados a los investigadores del Congreso.