(CNN) – El tesorero del Vaticano, el cardenal George Pell, será sometido a juicio por múltiples cargos de abuso sexual en las décadas de 1970 y 1990. El prelado es la figura más importante de la Iglesia católica que enfrenta cargos criminales por supuesta agresión.
La magistrada de Melbourne, Belinda Wallington, emitió su decisión el martes por la mañana después de una audiencia que duró un mes, en marzo, en la que escucharon testimonios de un gran número de testigos.
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Wallington retiró la mitad de los cargos, pero encontró que había pruebas suficientes para llevar a Pell, una de las figuras católicas más importantes del país, a juicio por múltiples cargos.
Pell, quien durante mucho tiempo ha defendido su inocencia, no mostró ninguna emoción cuando se anunció la decisión. Cuando se le preguntó cómo se declaraba, el cardenal dijo en voz alta y clara, “inocente”.
Al final de la audiencia, la Fiscalía confirmó que Pell ya había entregado su pasaporte y no se le permitió salir del país.
La decisión del martes de enviar el caso de Pell a juicio será una sacudida para una Iglesia católica, que ya está en problemas ya que lleva luchando contra acusaciones de abuso entre sus clérigos durante décadas.
Miles de casos sacados a la luz en todo el mundo han llevado a investigaciones y condenas en países como Estados Unidos, Canadá, Irlanda y Australia.
Los cargos están relacionados con acusaciones de abuso sexual histórico que abarcan tres décadas e incluyen eventos que supuestamente tuvieron lugar en una piscina en Victoria, en la década de 1970, y en la catedral de San Patricio durante la época de Pell como arzobispo de Melbourne, en la década de 1990.
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En un comunicado publicado el martes, el equipo legal de Pell dijo que su cliente “firmemente” mantuvo su inocencia. “Se defenderá de los cargos restantes. Le gustaría agradecer a todos los que lo han apoyado tanto aquí en Australia como en el extranjero durante este momento”, dijo el comunicado.
El Vaticano se unió a Pell en un comunicado divulgado el martes, diciendo que habían “tomado nota” de la decisión del tribunal. “El año pasado, el papa Francisco le concedió al cardenal Pell una licencia para que pudiera defenderse de las acusaciones. El permiso de ausencia aún está vigente”, dijo la declaración.
“Múltiples denunciantes”
El cardenal, de 76 años, llegó a la corte el martes por la mañana ante una gran presencia policial para escuchar la decisión que siguió a semanas de pruebas de múltiples demandantes que detallaron presuntos abusos que se remontan a la década de 1970.
Las audiencias se volvieron exaltadas a veces cuando el abogado defensor de Pell, Robert Richter, trató de evitar que el acusado fuera a juicio, incluso pidiéndole a Wallington que se excluyera del proceso.
La defensa argumentó que cualquier juicio sería un “desperdicio de dinero público, tiempo y esfuerzo”. Richter dijo que las acusaciones eran un intento de destruir la reputación del cardenal.
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El cardenal australiano fue acusado, el pasado mes de junio, y el papa Francisco le dio permiso para impugnar los cargos en su país natal. Después de que se anunciaran los cargos, en junio de 2017, dijo que la idea de abuso sexual era “aborrecible” para él.
Cuando las acusaciones de abuso sexual histórico por parte del cardenal Pell salieron a la luz por primera vez en 2016, el papa hizo hincapié en que “debemos evitar un veredicto mediático basado en el chisme”.
En enero, CNN reveló que Pell está ejerciendo en el seminario del Buen Pastor en Homebush, Sydney, con 40 sacerdotes aprendices mientras él lucha contra el caso.
El proceso preliminar comenzará en el Tribunal del Condado de Melbourne a las 9:00 a.m. hora local del miércoles.
La Iglesia, asediada
El rápido ascenso de Pell fue una fuente de orgullo para muchos católicos australianos, ya que rápidamente pasó de ser un párroco rural a las oficinas más altas del Vaticano.
En 1996, 30 años después de que fuera ordenado sacerdote, Pell fue nombrado arzobispo de Melbourne por el papa Juan Pablo II. Menos de una década más tarde, Pell fue nombrado arzobispo de Sydney, en 2001, y luego nombrado cardenal, en 2003.
Pero su mayor honor llegó en 2014 cuando fue elegido por el papa Francisco para convertirse en uno de los únicos nueve consejeros en el Consejo de Cardenales al frente de la Iglesia católica.
En diciembre de 2017, una Comisión Real en Australia hizo recomendaciones de que el Vaticano debería cambiar las antiguas leyes canónicas para reducir el riesgo futuro de abuso sexual.
Las recomendaciones incluyen hacer que el celibato sea voluntario para los sacerdotes y hacer un informe obligatorio del abuso a la policía si se admite durante la confesión.
En un comunicado el viernes, el arzobispo de Melbourne, Denis Hart, se negó a hacer comentarios en relación con la decisión sobre Pell, diciendo que tenía confianza en el sistema judicial en Australia. “La justicia ahora debe seguir su curso”, dijo.
– Delia Gallagher de CNN contribuyó a este artículo.