(CNN) – El Gobierno de Estados Unidos presidido por Donald Trump planea elevar los aranceles pendientes sobre 200.000 millones de dólares en bienes chinos del 10 al 25%, según confirmó a la CNN una fuente familiar con las discusiones.
La noticia fue reportada por primera vez por Bloomberg.
La medida, que no está finalizada y podría cambiar, según la fuente, se produce cuando Estados Unidos y China permanecen encerrados en una guerra comercial. Las conversaciones entre los funcionarios estadounidenses y chinos han hecho poco para aliviar las tensiones.
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Estados Unidos ya ha impuesto aranceles del 25% sobre los productos chinos por valor de 34.000 millones de dólares. China respondió de inmediato con sus propios aranceles sobre productos estadounidenses por valor de 34.000 millones de dólares.
Una segunda ronda de aranceles sobre productos por valor de 16.000 millones de dólares podría entrar en vigor tan pronto como esta semana.
El representante comercial de Estados Unidos, Robert Lighthizer, a principios de este mes aumentó las tensiones cuando publicó una lista de miles de exportaciones chinas adicionales por un valor de 200.000 millones de dólares que podrían enfrentar aranceles del 10% después de un período de comentarios públicos. Incluía frutas y verduras, bolsos de mano, refrigeradores, chubasqueros y guantes de béisbol.
Esos aranceles, que ahora podrían ser más pronunciados, podrían entrar en vigor tan pronto como en septiembre.
El vocero del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Geng Shuang, respondió el miércoles a las preguntas sobre la posibilidad de que Estados Unidos aumente los aranceles.
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“La posición de China es firme y clara”, dijo Shuang a los medios en una conferencia de prensa en Beijing. “Se mantiene sin cambios. El chantaje y la presión de EE.UU. nunca funcionarán en China. Si EE.UU. toma medidas para intensificar aún más la situación, seguramente tomaremos medidas para mantener firmemente nuestros derechos e intereses legítimos”.
“En cuanto a las comunicaciones y las conversaciones entre las dos partes, la parte china siempre cree que las disputas comerciales se resolverán a través de conversaciones y negociaciones y nuestra sinceridad y esfuerzos están ahí para que la comunidad internacional lo vea. Tengo que enfatizar que el diálogo debe basarse sobre el respeto mutuo y la igualdad, así como sobre las reglas y la credibilidad establecidas. Las amenazas y presiones unilaterales serán solo contraproducentes”, concluyó.