(CNN) – The Washington Post publicó lo que el diario describe como el “último artículo” escrito por el periodista saudí desaparecido Jamal Khashoggi, quien presuntamente fue asesinado y descuartizado en el consulado de su país en Estambul, Turquía, a principios de este mes.
En una nota al inicio de la columna, publicada el miércoles por la noche, la editora de Opinión Global del Post Karen Attiah escribió que ella dejó “de publicarlo porque esperábamos volvería con nosotros”.
“Ahora tengo que aceptarlo: Eso no va a ocurrir”, dijo. “Este es el último artículo suyo que editaré para el Post. Esta columna captura perfectamente su compromiso y pasión por la libertad en el mundo árabe. Una libertad por la que aparentemente dio la vida”.
En el artículo, Khashoggi lamenta la falta de libertad de expresión en el mundo árabe, dejando a la mayoría de su población “incapaz de abordar adecuadamente, mucho menos discutir en público, asuntos que afectan la región y su vida diaria”.
Él contrasta la situación actual con el sentimiento de muchos durante la Primavera Árabe, cuando ellos esperaban ser “emancipados de la hegemonía de sus gobiernos y las intervenciones consistentes y la censura de información”, solo para ver estrellarse esas expectativas cuando las revoluciones – tanto pacíficas como violentas – fallaron o fueron aplastadas por intervención foránea.
Uno de los mayores actores en rechazar la marea de revueltas populares árabes fue el propio régimen saudí, que envió tanques a Bahréin, abrazando a los tambaleantes dictadores y suprimió cualquier señal de disidencia en casa.
En su última columna para el Post, Khashoggi advierte que el “mundo árabe enfrenta su propia versión de la Cortina de Hierro, impuesta no por actores externos, sino a través de fuerzas domésticas que compiten por el poder”.
La respuesta de Khashoggi a la escasez de medios de confrontación en los países árabes es fundar y promover una organización de medios trasnacional.
“Sufrimos por la pobreza, la mala administración y la pobre educación”, dijo Khashoggi. “Por medio de la creación de un foro internacional independiente, aislado de la influencia de los gobiernos nacionalistas que expanden el odio a través de la propaganda, la gente común en el mundo árabe será capaz de abordar los problemas estructurales que sus sociedades enfrentan”.