(CNN) – El envío de bombas y químicos a través del correo es algo raro, pero aterrador. De acuerdo con el Servicio de Inspección del Correo de Estados Unidos, el Servicio Postal procesa más de 170.000 millones de paquetes de correo cada año y solo una pequeña fracción – 16 en los últimos años – fueron investigados como cartas bomba.
Esa cifra, de acuerdo con la agencia, equivale a menos de uno en 10.000 millones.
Sin embargo, las cartas bomba pueden ser mortales, como el paquete que mató a una persona de 17 años en Austin, Texas, a inicios de este año, o los ataques con ántrax en 2001.
Esto es lo que el Servicio Postal y las agencias gubernamentales revisan para determinar si un paquete es sospechoso:
- Palabras mal escritas o con faltas de ortografía
- Fotos o demasiadas marcas en el envoltorio
- Sellos o escritura en idiomas extranjeros poco familiares
- Dirección del remitente poco familiar o sin sentido
- Manchas de aceite, polvo y otras
- Empaquetado descuidado
- Sonidos, olores o vibraciones
- Direcciones incorrectas o genéricas
- Apariencia abultada
- Paquete desequilibrado o desigual
- Cables sobresalientes
- Exceso de sellos, cinta o ataduras
Lo que debes revisar
Los paquetes sospechosos regularmente tienen varias señales, dicen investigadores, personal de seguridad e inspectores de correo. Los paquetes enviados a las oficinas de CNN en Nueva York y a varias figuras públicas de Estados Unidos mostraban muchas de ellas:
- El papel en que iban envueltos estaba dañado y arrugado
- Los nombres y direcciones en la parte donde va la dirección del remitente tenían faltas de ortografía
- Una esquina del paquete estaba cubierta con estampillas
Lo que debes hacer
Si te cruzas con un paquete sospechoso, estos son algunos consejos sobre qué hacer, de acuerdo con el Departamento de Seguridad Nacional.
- Abandona el paquete, evacúa el área y contacta a personal de emergencia
- Lava tus manos y otras partes de la piel que hayan estado expuestas con jabón y agua
- Acordona el área contigua y apaga todo tipo de equipo en el lugar
- Si es posible, y sin mover el paquete, registra todo lo que puedas sobre este: su apariencia, marcas, el nombre y la dirección