El ajonjolí es un alimento que cada vez más produce alergias en la población de Estados Unidos.

(CNN) – El ajonjolí podría volverse el nuevo alimento alergénico agregado a la lista de alimentos de los cuales se requiere que sean nombrados en las etiquetas, anunció el comisionado Scott Gottlieb de la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) el 12 de noviembre.

Ocho grandes alimentos alergénicos deben ser actualmente declarados en las etiquetas usando sus nombres comunes: leche, huevos, pescado, crustáceos, almendras, maní, trigo y soya.

Esos alimentos representan más del 90% de las alergias alimentarias graves documentadas en Estados Unidos cuando se aprobó la Ley de etiquetado de alérgenicos alimentarios y protección del consumidor, que exigía el etiquetado claro de esos ingredientes, en 2004.

La FDA cita la presencia no declarada de alergénicos como una de las principales razones para el retiro de alimentos y un problema de salud pública.

“Desafortunadamente estamos empezando a ver evidencia de que las alergias por ajonjolí pueden ser una preocupación creciente en Estados Unidos”, dijo Gottlieb. “Una cantidad de estudios, por ejemplo, sugieren que la prevalencia de alergias por ajonjolí en Estados Unidos es más del 0,1%, a la par con alergias a la soya y el pescado”.

Lisa Gable, presidenta ejecutiva del grupo sin ánimo de lucro Food Allergy Research and Education, dijo que el estudio sugiere que más de 300.000 estadounidenses están afectados por alergias al ajonjolí.

“El consenso tanto de doctores como de grupos defensores que apoyan a la gente con alergias a las comidas es que el ajonjolí es cada vez un problema nacional y absolutamente debería ser añadido como uno de los alergénicos que debe ser puesto en las etiquetas”, dijo Gable.

El grupo dice que las reacciones al ajonjolí pueden variar de persona a persona y pueden ir desde urticaria hasta anafilaxia. La posibilidad de tener estas reacciones severas es la razón por la que este grupo cree que las etiquetas para los productos con ajonjolí debe cambiar.

“Las personas con alergias de comidas que pueden ser mortales y la familia y amigos que los apoyan son muy cuidadosos en leer las etiquetas”, dice Cable. “Necesitan ser capaces de ver correctamente una etiqueta y asegurarse de que no se están enfrentando una situación de contaminación cruzada, en la que un ingrediente no está oculto porque se utiliza un nombre diferente”.

El doctor Robertwood, presidente de la Academia Estadounidense de Alergia, Asma e Inmunología, concuerda: “El ajonjolí podría estar en una lista de ingredientes bajo una palabra como tahina, o bajo un término genérico como ‘sabor natural’, así que es preocupante que incluso un paciente muy cuidados o su familia no puedan saber lo que contiene la comida”.

Un nuevo estudio publicado este lunes en el diario Pediatrics también apoya la noción de que el ajonjolí debe ser alertado en las etiquetas. Los resultados de una encuesta entre hogares estadounidenses produjo 38.408 respuestas de alergias al ajonjolí entre niños.

Los investigadores encontraron que hubo un estimado de 0,2% de prevalencia a alergias por ajonjolí y que afectan a cerca de unos 150.000 niños.

Fue la novena alergia más común en un estudio, después del maní (que afecta a 1,6 millones de niños), seguido por la leche (1,4 millones), mariscos (1 millón), almendras (900.000), huevos (900.000), “pescados de aletas” (400.000), trigo (400.000) y soya (400.000). Más de la mitad de aquellos con alegrías al ajonjolí deben tener un autoinyector de epinefrina.

La FDA está pidiendo información, específicamente de epidemiólogos, nutricionistas, investigadores de alergias y médicos, “para que podamos aprender más sobre la prevalencia y severidad de las alergias al ajonjolí en Estados Unidos, así como la presencia de alimentos que contienen ajonjolí vendidos en el país. Esto incluye alimentos que, bajo regulaciones, pueden no requerir que se revele el ajonjolí como ingrediente”.

La agencia también quiere escuchar las opiniones de profesionales médicos, investigadores, consumidores y expertos de la industria alimentaria para tener un entendimiento más completo de los riesgos e impactos de cambiar las leyes alrededor de la revelación del ajonjolí.