(CNN) – Ningún rastro de explosivos fue hallado en el lugar de la caída del helicóptero que acabó con la vida de la nueva gobernadora del estado mexicano de Puebla y de su esposo, también político, dijo el martes un funcionario del gobierno.
La gobernadora de Puebla, Martha Erika Alonso, y su esposo, el senador Rafael Moreno Valle, murieron en el incidente ocurrido en la víspera de Navidad en el centro de México, al igual que el piloto, copiloto y una quinta persona a bordo, según las autoridades.
“Después de un análisis exhaustivo y cuidadoso de los restos de la aeronave, (especialistas de la Secretaría de Marina) no encontraron explosivos o sustancias ajenas al combustible que hayan explosionado dentro de la aeronave accidentada”, dijo el secretario de Seguridad Pública y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo, en una conferencia de prensa en Ciudad de México.
Durazo dijo que, el martes, los investigadores utilizaron perros para olfatear bombas y otros equipos especializados en el lugar del incidente en un esfuerzo por detectar rastros de explosivos.
Las autoridades creen que la nariz del helicóptero se estrelló primero.
“Aparece el patín de cola elevado, aparece el rotor en la parte inferior, lo que hace presuponer que posiblemente hayan impactado con un grado de alrededor de 60 grados”, dijo a periodistas el subsecretario de Transportes de la Secretaría de Comunicaciones Transportes, Carlos Alfonso Moran.
Moran dijo que la causa de la caída aún se está investigando, con la asistencia de expertos en aviación canadiense. La Junta Nacional de Seguridad en el Transporte de Estados Unidos no podrá asistir debido al cierre del gobierno, dijo.