(CNN) – El arresto de un piloto de Delta Air Lines bajo sospecha de estar bajo la influencia del alcohol hace que los viajeros se cuestionen acerca de las políticas de alcohol para los pilotos de aerolíneas comerciales y la evaluación para detectar comportamientos que podrían poner en peligro a los pasajeros.
Un piloto de Delta Air Lines fue bajado de un avión totalmente lleno el martes por la mañana en el Aeropuerto Internacional de Minneapolis-Saint Paul después de que un comportamiento sospechoso en una línea de inspección de la Administración de Seguridad en el Transporte (TSA, por sus siglas en inglés) para los miembros de la tripulación provocó más investigaciones por parte de la policía del aeropuerto.
No hay cargos formales contra el piloto en este momento y cualquier queja formal está pendiente mientras los investigadores esperan los resultados de toxicología, dijo el portavoz del aeropuerto Patrick Hogan a CNN.
Pero incluso la posibilidad de que un vuelo despegue con un piloto inhabilitado para volar plantea preguntas para las aerolíneas.
La responsabilidad de señalar comportamientos potencialmente peligrosos recae en muchas partes y agencias gubernamentales diferentes, e incluso en los propios pilotos.
¿Beber y luego volar?
Las regulaciones de la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA, por sus siglas en inglés) para pilotos comerciales son claras:
Las normas de drogas y alcohol de la FAA prohíben específicamente a los pilotos realizar tareas como parte de una tripulación de vuelo para alguna aerolínea con drogas prohibidas en sus sistemas.
También restringen a los pilotos de “volar o intentar volar una aeronave dentro de las primeras 8 horas después de consumir alcohol o si tienen una concentración de alcohol de 0,04 por ciento o mayor”, de acuerdo con las reglas de la FAA. Los pilotos no pueden consumir alcohol “mientras están de servicio o dentro de las primeras 8 horas de realizar tareas de miembros de la tripulación de vuelo”.
Las regulaciones también requieren que los miembros de la tripulación se sometan a pruebas de alcohol en la sangre cuando lo soliciten los funcionarios autorizados para solicitar esas pruebas.
Las pruebas incluyen exámenes aleatorios de drogas y alcohol; prueba por una sospecha razonable de alcohol y / o causa; pruebas de alcohol y drogas después de un accidente; pruebas de alcohol o drogas de regreso al trabajo luego de una rehabilitación exitosa, y pruebas de seguimiento de drogas y / o alcohol.
La TSA no examina a los miembros de la tripulación por drogas o alcohol. Sin embargo, si un funcionario de la agencia sospecha que un miembro de la tripulación de una aeronave está bajo la influencia de drogas o alcohol, debe notificar a un supervisor que, a su vez, alertaría a la policía local, según la TSA.
Las aerolíneas también tienen políticas que pueden ampliar las reglas de la FAA.
En una declaración de Delta Air Lines en respuesta al incidente con el piloto en Minneapolis, la aerolínea dijo que “la política de alcohol de Delta se encuentra entre las más estrictas de la industria y no tenemos tolerancia ante alguna violación. Delta está cooperando con las autoridades locales en su investigación”.
La aerolínea no respondió de inmediato a las solicitudes de detalles adicionales sobre su política de alcohol.
A escala internacional, las reglas sobre el alcohol para los miembros de la tripulación de vuelo varían según el país, con la orientación de la Organización de Aviación Civil Internacional.
Los pilotos también deben decir algo
Los pilotos también tienen prohibido permitir que los miembros de la tripulación que parezcan estar bajo la influencia del alcohol o drogas vuelen en sus aviones.
El escenario en el que “el piloto parece haber estado bebiendo” todavía se usa como una pregunta de entrevista de contratación, dijo el analista de seguridad de aviación Jeff Price.
Se hace principalmente como una pregunta de seguridad “ya que cualquier miembro de la tripulación que crea que cualquier otro miembro de la tripulación está bajo la influencia de drogas o alcohol debe informarlo a las autoridades y, sobre todo, no permitir que esa persona opere una aeronave”, dijo Price, propietario de Leading Edge Strategies y profesor de ciencias aeronáuticas y aeroespaciales en la Universidad Estatal Metropolitana de Denver.
“Muchos pilotos simplemente le dirán al piloto sospechoso que no se ve bien y que debería reportarse enfermo”, dijo Price. “De alguna manera viola las regulaciones, pero una cosa es lo que se supone que debe hacerse, y otra lo que sucede en el mundo real”.
El sector de los pilotos no es inmune al abuso de drogas y alcohol, dijo Price. “La buena noticia es que las aerolíneas comerciales hacen uso de tripulaciones múltiples, por lo que las posibilidades de que una persona intoxicada llegue a operar el avión son muy escasas”.
Responsabilidad personal y pruebas aleatorias
Las reglas son claras, dijo el piloto de jet privado de negocios y el instructor de vuelo Rob Mark. “La FAA dice que no tocaremos alcohol dentro de las 8 horas de volar”, dijo.
Además de las pruebas aleatorias, el sistema realmente depende de que los pilotos asuman una responsabilidad personal, dijo Mark, quien también es editor senior de la revista Flying y editor de Jetwhine.com.
“Todos conocemos las reglas y todos sabemos que ponemos nuestra licencia en peligro si las violamos y somos atrapados. Pero aún peor, pondríamos en riesgo la seguridad de las personas a bordo del avión que nos han confiado. Mi opinión es que eso es suficiente para evitar que la mayoría de los pilotos consuman alcohol.
“Los pilotos con problemas de alcohol son raros, pero no desconocidos. La mayoría de las aerolíneas probablemente han tenido pilotos que fueron detectados y rehabilitados para volver a volar con el fin de que puedan seguir adelante. Supongo que se les hacen pruebas con mayor frecuencia”.