Washington (CNN) – Funcionarios de defensa de Estados Unidos recibieron la orden de planificar posibles respuestas al ataque a las instalaciones petroleras de Arabia Saudita, en una reunión el lunes con el presidente Donald Trump, pero la Casa Blanca está esperando que los gobernantes del reino decidan una respuesta antes de trazar un camino a seguir, dijeron a CNN funcionarios de la administración y fuentes familiarizadas con el asunto.
Dos funcionarios de defensa de Estados Unidos dijeron que en la reunión en la Casa Blanca el Pentágono recibió instrucciones de “hacer planes”, pero agregaron que no se presentaron opciones detalladas.
Una fuente familiarizada con las discusiones en la Casa Blanca dijo que la administración siente que el tiempo está de su lado mientras elabora un caso contra Irán, que ha negado la responsabilidad de los ataques. El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, viajaría a Arabia Saudita el martes por la noche para consultar con los gobernantes allí y la fuente dijo que no se hará nada hasta que Pompeo haya regresado y el equipo de seguridad nacional de Trump se haya reunido.
‘Movimientos estúpidos’
“No hay reacciones instintivas a esto, es muy sistemático, lo que se hace con paciencia es lo que evita movimientos estúpidos”, dijo la fuente.
El enfoque ya está siendo criticado. El senador Lindsey Graham, el republicano de Carolina del Sur que ha abogado por un ataque contra Irán en respuesta al ataque saudí, tuiteó el martes que “la respuesta mesurada del presidente @realDonaldTrump con respecto al derribo de un avión no tripulado estadounidense fue claramente vista por el régimen iraní como un signo de debilidad”.
Trump respondió con un tuit propio y respondió: “No Lindsey, fue una señal de fortaleza que algunas personas simplemente no entienden”.
Funcionarios de la administración calculan que con la Asamblea General de las Naciones Unidas, que tendrá lugar en Nueva York la próxima semana, funcionarios estadounidenses tendrán la oportunidad de reunirse con líderes mundiales y discutir los próximos pasos. Es muy poco probable que se haga algo antes de eso, dijo una fuente familiarizada con las discusiones en la Casa Blanca.
El ataque, reivindicado por los rebeldes hutíes en Yemen, obligó a la empresa estatal Saudi Aramco a reducir a la mitad su producción, eliminando del mercado global más del 5% del consumo diario de crudo del mundo.
Ataques cibernéticos y operativos contra las refinerías de petróleo iraníes fueron evaluadas después de la caída de un avión no tripulado estadounidense en el Estrecho de Ormuz en junio, pero no ha habido una consideración seria para revisar esas opciones, dijo la fuente.
Trump ha dicho en repetidas ocasiones que la responsabilidad recae en Arabia Saudita cuando se trata de dictar el camino a seguir y ha dejado en claro que no tiene prisa.
“Tenemos que sentarnos con los sauditas y resolver algo”, dijo ayer a periodistas. “Ese fue un ataque contra Arabia Saudita y no un ataque contra nosotros”.
“Tenemos muchas opciones, pero no estoy revisando las opciones en este momento”, dijo Trump. “Queremos estar seguros de quién hizo esto. Estamos lidiando con Arabia Saudita … Veremos qué sucede”.
Los funcionarios de defensa también dijeron que el Comando Central de Estados Unidos no ha hecho solicitudes adicionales de fuerzas en la región a raíz del ataque y que la posición de los soldados estadounidenses en la región no se ha ajustado.
Pero el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, dejó en claro el martes que la acción militar es una opción.
“Tras el ataque no provocado de este fin de semana contra varias instalaciones petroleras en Arabia Saudita, les prometo que estamos listos. Como dijo el presidente, no queremos guerra con nadie, pero Estados Unidos está preparado, nosotros están cargados y con seguro”, dijo Pence, mientras describía al ejército estadounidense como la” fuerza de combate mejor equipada, mejor entrenada y tecnológicamente más avanzada del mundo”.
Durante un discurso en la Heritage Foundation, Pence dijo que la comunidad de inteligencia de Estados Unidos está trabajando para “revisar la evidencia” del ataque y anunció que Pompeo viajaría a Arabia Saudita para consultar con los gobernantes del Reino.
“Prefiero no reunirme con él”
Pence habló mientras Trump, en camino a California, daba marcha atrás en sus comentarios previos que indicaban su disposición a reunirse con funcionarios iraníes, y les decía a los periodistas que ya no estaba interesado en ver al presidente Hassan Rouhani al margen de la Asamblea General de la ONU.
“Nunca descarto nada, pero prefiero no reunirme con él”, dijo Trump.
El líder supremo de Irán, el ayatolá Ali Khamenei, quien también habló el martes, descartó la posibilidad y dijo que “no habrá negociación con Estados Unidos a ningún nivel”. El líder supremo iraní dejó solo una pequeña ventana para futuras conversaciones multilaterales: “Si Estados Unidos repudia, se arrepiente y vuelve al tratado nuclear que violó”. De lo contrario, el gobierno iraní no se reunirá con ninguno de los funcionarios estadounidenses, “ni en Nueva York ni en ningún otro lugar”.
El ministro de Relaciones Exteriores de Irán, Javad Zarif, acusó a Pompeo de “máximo engaño” y a los funcionarios estadounidenses de estar “en negación” si creen que los hutíes de Yemen no atacarían a Arabia Saudita después de más de cuatro años de guerra que ha llevado a millones de civiles yemeníes a al borde del hambre.
El subsecretario de prensa de Estados Unidos, Hogan Gidley, dijo a periodistas el martes que la administración “no puede decir definitivamente” que Irán estaba detrás del ataque contra las instalaciones petroleras en Arabia Saudita y todavía está en el proceso de presentar el caso al pueblo estadounidense.
Un funcionario de defensa le dijo a CNN que Estados Unidos tiene imágenes que sugieren que el ataque se originó desde Irán, incluida evidencia de que se están preparando armas para su lanzamiento dentro del país. CNN no ha visto las imágenes.
Mientras Arabia Saudita se recupera, un funcionario de defensa estadounidense le dijo a CNN que Washington tiene un equipo de expertos forenses en el terreno para ayudar a analizar el sitio del ataque y los misiles sin explotar que no alcanzaron sus objetivos previstos.
Otro funcionario estadounidense con conocimiento directo de la información más reciente dijo que Arabia Saudita ha recuperado placas de circuito completamente intactas de una de las armas utilizadas en el ataque y que se utilizaron drones y misiles de crucero. CNN no ha visto evidencia para respaldar esas afirmaciones.
El funcionario agregó que los sauditas y Estados Unidos esperan poder rastrear el punto de origen de la placa de circuito hasta Irán, señalando que las rutas que tomaron los misiles o drones evitaron las áreas donde los sistemas de radar de Estados Unidos y Arabia Saudita son más fuertes y que el ataque fue sofisticado.
“Tienen la capacidad”
Un alto funcionario de la administración dijo que los hutíes no tienen la capacidad de atacar desde Yemen. “Los hutíes nunca han empleado este tipo de vehículos no tripulados, ni los vehículos no tripulados ni los misiles de crucero empleados en el ataque pueden llegar a las instalaciones desde Yemen. No es posible”.
Las Naciones Unidas dicen lo contrario. Los funcionarios de la ONU emitieron un informe en enero que decía que las capacidades de los drones hutíes parecen haberse vuelto significativamente más sofisticadas el año pasado, capaces de recorrer distancias que ponen a los objetivos de Arabia Saudita dentro del alcance y de causar un daño mucho mayor que sus drones anteriores, que podrían viajar un máximo de 150 kilómetros
“La característica más distintiva del UAV-X es su resistencia y alcance significativamente mayores”, dijo el informe sobre el nuevo modelo de dron, y agregó que “puede tener un alcance máximo de entre 1.200 km y 1.500 km, dependiendo de las condiciones del viento. Esto le daría credibilidad a las afirmaciones de los hutíes de que tienen la capacidad de atacar objetivos como Riad, Abu Dhabi y Dubai”.
Betsy Klein, Vasco Cotovio y Sara Mazloumsaki de CNN contribuyeron a este informe