(CNN Español) – En sus argumentos de apertura del juicio contra Juan Antonio (Tony) Hernández en Nueva York, los fiscales afirmaron que el Chapo Guzmán entregó US$ 1 millón al acusado para la campaña de su hermano mayor, el hoy presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández.
Tony Hernández, también excongresista hondureño, está acusado de conspirar para importar cocaína a Estados Unidos, pero rechaza todos los cargos en su contra. Fue arrestado el 23 de noviembre de 2018 en Miami.
Según documentos presentados por varios fiscales federales en agosto, el presidente Hernández, su hermano menor, otros políticos y agentes de la ley de su país formaron parte de un “plan criminal más amplio” para usar el narcotráfico “con el fin de consolidar el poder y el control en Honduras”.
El presidente Juan Orlando Hernández no ha sido acusado formalmente en este caso y ha negado enérgicamente toda participación en delitos de narcotráfico. En mayo de este año, sí confirmó —por medio de un comunicado— que él y varios de sus colaboradores habían sido investigados por la DEA por sospechas de narcotráfico y lavado de dinero, pero aseguró que “nunca se encontró evidencia contra el presidente”.
El presidente Hernández respondió en su cuenta oficial de Twitter a los señalamientos hechos el miércoles en la corte:
“La alegación en sí es 100% falsa, absurda y ridícula… esto es menos serio que “Alicia en el País de las Maravillas”.
Los abogados de Tony Hernández se negaron a comentar las acusaciones de que su cliente había recibido del Chapo Guzmán.
Jeffrey Lichtman, abogado de Guzmán, dijo —por su parte— que las declaraciones de los fiscales son falsas.
“¿Por qué no se reveló esto durante el juicio del Chapo? Es falso. El gobierno (de EE.UU.) está confundiendo al Chapo con uno de sus muchos testigos cooperantes a los que no llamaron en el juicio, por una razón. Porque le faltaba credibilidad”, dijo Lichtman.