(CNN Español) – La tarde de este viernes la Unidad Táctica de Operaciones, UTOP, del departamento de Cochabamba, se amotinó en su guarnición, en medio de la crisis política y social por la que atraviesa Bolivia luego de las elecciones del pasado 20 octubre cuestionadas por la oposición y la ciudadanía por un supuesto fraude, luego de las advertencias sobre el proceso de parte de los observadores de la OEA y la UE.
Luego de 17 días de conflicto, movilizaciones y marchas, un paro indefinido nacional, el cierre de fronteras y luego de la muerte de 3 ciudadanos y de 346 heridos a nivel nacional, según el defensor del pueblo, los uniformados se rebelaron este viernes en la ciudad de Cochabamba.
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Los uniformados pedían la renuncia del comandante nacional, el coronel Raúl Grandy, y dijeron que no están de acuerdo con las determinaciones del Gobierno.
El comandante general de la Policía, Yuri Calderón, informó este viernes más tarde que designó a Jaime Edwin Zurita en reemplazo de Grandy, según información de la agencia ABI.
“Se ha tomado la decisión de relevar al comandante departamental de Cochabamba toda vez que él ha presentado un informe médico en el cuál tendría que ser sometido a una cirugía de inmediato. Hemos enviado al nuevo comandante departamental de Cochabamba y en este momento se está haciendo cargo ya del comando y con esto esperemos que el servicio policial retome nuevamente su cause y el resto del país está revistiendo normalidad”, dijo Calderón.
Los ciudadanos y grupos cívicos que están movilizados en las calles, apoyan el motín policial en esa ciudad.
Hasta el momento no se han pronunciado las autoridades de gobierno.
En Santa Cruz también se reportan motines.