(CNN) –– La exembajadora de EE.UU. en Ucrania Marie Yovanovitch, quien fue despedida de su cargo, testificó este viernes en el proceso de juicio político contra Donald Trump y aseguró que quedó “conmocionada y devastada” tras saber que el mandatario la había denigrado durante su llamada telefónica de julio pasado con el presidente ucraniano Volodimir Zelensky. Mientras tanto, un tuit de Trump atacándola, publicado durante la audiencia, desató una respuesta en tiempo real, así como nuevas acusaciones demócratas sobre intimidación de testigos.
Cuando la exembajadora testificaba ante el Congreso, Trump publicó en Twitter que “en todas partes Marie Yovanovitch resultó mala”, lo que provocó una respuesta minutos después del presidente de la Comisión de Inteligencia de la Cámara Adam Schiff, demócrata por California, quien permitió que Yovanovitch reaccionara a este mensaje del presidente atacándola. Schiff aseguró que el tuit fue “diseñado para intimidarla” a ella y a otros testigos.
“Ahora, el presidente te está atacando en tiempo real”, le dijo Schiff a Yovanovitch. “¿Qué efecto crees que puede tener eso en otros testigos a la hora de presentarse y exponer las irregularidades?”, preguntó el congresista.
“Es muy intimidante”, dijo Yovanovitch.
La dinámica de acá para allá entre Twitter y la sala de audiencia de la Cámara agregó nuevas acusaciones a la segunda audiencia pública del proceso de juicio político contra Trump, con varios demócratas sugiriendo que la intimidación del presidente podría resultar en posibles artículos del juicio político.
Yovanovitch, quien testificó que había sido removida de su puesto tras una “campaña de desinformación” por parte de Rudy Giuliani, abogado personal del presidente, les dijo a los legisladores que se sintió amenazada cuando se enteró de que Trump había dicho en su llamada del 25 de julio a su homólogo de Ucrania, Volodymyr Zelensky, que ella “iba a pasar por algunas cosas”.
“Estaba conmocionada y devastada de ser nombrada en una llamada telefónica entre dos jefes de estado, de una forma en que el presidente Trump dijo que yo representaba ‘malas noticias’ para otro líder mundial y que iba a pasar por algunas cosas”, relató Yovanovitch. “Fue un momento terrible”, insistió.
Aunque el testimonio de la exembajadora no está directamente relacionado con la suspensión de la ayuda a Ucrania y el incentivo de una reunión en la Casa Blanca para que ese país abriera investigaciones contra los opositores políticos de Trump, los demócratas dicen que el retiro de su cargo marca el comienzo de una campaña de diplomacia a la sombra que provocó la investigación de juicio político hacia el presidente y su relación con Ucrania.
El tuit de Trump desata reacciones inmediatas
Los demócratas pusieron sobre la mesa que el mensaje del presidente era otra señal de una intimidación a testigos, un delito que podría terminar incluido en los posibles artículos del juicio político contra el presidente.
“Puede llegar a eso”, señaló el demócrata James Clyburn, jefe de disciplina de la mayoría en la Cámara, cuando se le preguntó si la intimidación de testigos debería ser parte de los artículos incluidos en el posible juicio político.
El representante Eric Swalwell, demócrata por California en la Comisión de Inteligencia de la Cámara Baja, dijo que la manipulación de testigos “será considerada, si hay evidencia de eso”. Agregó que creía que había “pruebas contundentes” de eso.
Pero los defensores republicanos del presidente no le dieron mayor importancia al tuit, culpando a la frustración de Trump con los demócratas.
“Mira, el presidente ha estado frustrado con este ataque implacable en su contra por parte de los demócratas, el cual comenzó incluso antes de llegar al cargo. Creo que el pueblo estadounidense puede relacionarse con la frustración”, aseguró el representante republicano de Ohio Jim Jordan. “Los demócratas comenzaron con su loca investigación en julio de 2016 y ahora avanzan en esto, así que creo que eso es lo que impulsa esto”, completó.
El representante Lee Zeldin, un republicano de Nueva York que asistió a la audiencia de este viernes, dijo que el tuit pretendía “garantizar que toda la historia salga a la luz”, acusando a Schiff de leer solo una parte del mensaje a Yovanovitch.
Sin embargo, un republicano en la Comisión de Inteligencia de la Cámara de Representantes dijo que el presidente no debería estar atacando a Yovanovich.
“No concuerdo con el tuit”, indicó la representante Elise Stefanik, de Nueva York. “Creo que la exembajadora Yovanovitch es una servidora pública, como muchos de nuestros funcionarios en el servicio exterior”.
Después de que la audiencia concluyera, Stefanik afirmó que los demócratas estaban tratando de distraer la atención centrándose en la publicación de Twitter.
“Estas audiencias no son sobre tuits sino sobre un juicio político al presidente de Estados Unidos”, añadió.
Por su parte, Trump defendió su mensaje durante un evento en la Casa Blanca. “¿Saben qué? Yo tengo el derecho a hablar. Tengo libertad de expresión al igual que otras personas, pero ellos han quitado los derechos republicanos”, aseveró el presidente.
El tuit de Trump incluía una acusación acerca de que Yovanovitch debía ser culpada por problemas en Somalia, país en donde fue su primera asignación internacional. El presidente también reclamó en esa publicación su “derecho absoluto” de nombrar embajadores.
“En todas partes, Marie Yovanovitch resultó mala. Comenzó en Somalia, ¿cómo fue eso? Luego avanzó rápidamente a Ucrania, donde el nuevo presidente ucraniano habló desfavorablemente de ella en mi segunda llamada telefónica con él. Es un derecho absoluto del presidente de EE.UU. nombrar embajadores”, se leía en el tuit de Trump. “Lo llaman ‘servir a gusto del presidente’”, concluyó.
Cuando en la audiencia se le pidió que respondiera al tuit, Yovanovitch dijo: “Quiero decir, no creo que tenga tales poderes, ni en Mogadiscio, Somalia, ni en otros lugares”.
La política de Ucrania, “secuestrada”
Los demócratas aseguran que el despido de Yovanovitch, el cual Trump ordenó después de una campaña de desprestigio por parte de Giuliani y sus socios, preparó el escenario para impulsar a Ucrania a investigar a los rivales políticos de Trump.
“La pregunta que tenemos ante nosotros no es si Donald Trump podía retirar a una embajadora estadounidense con una reputación estelar por luchar contra la corrupción en Ucrania, sino por qué querría hacerlo”, indicó Schiff en su declaración de inicio.
“Los poderes de la presidencia son inmensos, pero no son absolutos y no pueden usarse con un propósito corrupto”, agregó Schiff. “El pueblo estadounidense espera que su presidente use su autoridad al servicio de la nación, no para destruir a otros y promover sus intereses personales o políticos”, agregó.
Yovanovitch dijo que son falsas las acusaciones que en su contra hizo Giuliani y que llevaron a su despido, incluida la idea de que tenía una lista de personas para “no procesar” y que había hablado mal del presidente ante los funcionarios de la embajada. El esfuerzo, sostuvo Yovanovitch, mostró que “intereses extranjeros y corruptos aparentemente secuestraron nuestra política de Ucrania”.
Y continuó: “No entiendo los motivos del señor Giuliani para atacarme, ni puedo ofrecer una opinión sobre si creía en las acusaciones que difundió sobre mí”. “Claramente, nadie en el Departamento de Estado lo hizo. Lo que puedo decir es que el señor Giuliani debió saber que esas afirmaciones eran sospechosas, ya que, según informes, provenían de personas con motivos cuestionables y con razones para creer que sus ambiciones políticas y financieras podrían ser obstaculizado por nuestra política anticorrupción en Ucrania”, completó.
Luego Yovanovich dijo: “Si nuestro representante en jefe está arrodillado, limita nuestra efectividad para salvaguardar los intereses vitales de seguridad nacional de Estados Unidos”.
Legisladores de ambos partidos elogiaron la larga carrera de servicio de Yovanovitch, incluyendo republicanos que alcanzaron un tono notablemente diferente al del presidente la exembajadora en Ucrania.
Yovanovich les dijo a los legisladores que había sido un “período muy doloroso” debido a los ataques del presidente y sus socios. “Aunque obviamente no discuto que el presidente tiene el derecho de retirar a un embajador en cualquier momento por el motivo que sea, sí me pregunto por qué fue necesario manchar mi reputación falsamente”, dijo en respuesta a un legislador republicano.
La representante Terri Sewell, una demócrata de Alabama, preguntó cómo su terrible experiencia había afectado a su familia.
“Realmente no quiero meterme en eso”, respondió Yovanovitch. “Gracias por preguntar”.