(CNN) – El expresidente de Estados Unidos Barack Obama hizo algo este fin de semana que hasta ahora no había podido hacer en la carrera primaria demócrata: llamar al ex vicepresidente Joe Biden y felicitarlo.
Aunque los dos hablan regularmente, la llamada de Obama el sábado por la noche se produjo después de la victoria de Biden en Carolina del Sur. Pero las palabras de elogio a Biden no cambiaron el hecho de que Obama todavía planea mantenerse al margen y no involucrarse en las primarias.
Una persona cercana a Obama le dijo a CNN que la postura del expresidente no ha cambiado: no tiene planes inmediatos de ofrecer su respaldo a Biden, ni a nadie, mientras la carrera por la nominación presidencial se dirige al supermartes.
“Somos escépticos de que un respaldo de nuestra parte realmente pueda cambiar los vientos políticos en este momento”, dijo a CNN la persona cercana a Obama. Si Obama respaldara a Biden, dijo la fuente, hay “una posibilidad muy real de que sea contraproducente”.
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Pero, lo que es más importante, Obama todavía piensa que su papel más valioso es tratar de unificar al partido.
“Siente que está en una posición singular para ayudar a unificar al partido al final de esto”, dijo el confidente de Obama. “Y si intentara poner su dedo en la balanza ahora, le quitaría su capacidad de hacerlo cuando más se necesita: las elecciones generales”.
La persona agregó: “Así que está preparado para desempeñar un papel vigoroso en fusionar el partido con el candidato y trabajar para derrotar a Trump, pero intervenir ahora probablemente solo cause más división y debilite su posición para cuando el partido lo necesite más”.
Si bien Obama puede abstenerse de influir en la carrera, se ha convertido en un personaje central en las primarias demócratas.
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Biden invoca el nombre y el legado de Obama una y otra vez, prometiendo luchar para proteger Obamacare y otros logros, incluso cuando otros candidatos como Michael Bloomberg también mencionan con frecuencia su asociación con Obama.
Obama ha rogado a los demócratas que eviten las pruebas de pureza en su búsqueda para elegir al candidato más fuerte para desafiar al presidente Donald Trump. Sus asesores dicen que tiene la intención de evitar involucrarse en la carrera lo más que pueda.