(CNN) – Estados Unidos se está preparando para entrar en su semana más crítica hasta la fecha en la lucha contra el coronavirus a medida que la cifra de muertos superó los 10.000. Y la pandemia aún no está bajo control, dijo un alto funcionario de salud de Estados Unidos.
A pesar de las medidas para imponer el distanciamiento social y proporcionar a los trabajadores médicos los recursos necesarios para tratar a los pacientes, “estamos luchando por controlar (la pandemia)”, dijo el domingo el doctor Anthony Fauci, del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas de Estados Unidos, en “Face the nation” de CBS.
El número de casos en todo el país aumentó a al menos 356.942 el lunes, y el número de muertes aumentó a al menos 10.524, según datos compilados por la Universidad Johns Hopkins. Las autoridades han advertido que la semana que viene será sombría, trayendo más casos y muertes. El cirujano general de Estados Unidos dijo que será la semana “más dura y más triste” que muchos estadounidenses hayan enfrentado.
“Quiero que los estadounidenses entiendan que a pesar de lo difícil que será esta semana, hay una luz al final del túnel”, dijo el vicealmirante Jerome Adams, en “Fox News Sunday”.
Describió la próxima semana como un “momento como Pearl Harbor” y un “momento como el 11 de septiembre”.
Nueva York reporta caída de muertes
Aún así, el fin de semana trajo algunas noticias prometedoras en Nueva York, el estado que ha reportado la mayoría de los casos y muertes.
El gobernador Andrew Cuomo informó el domingo, por primera vez en días, una caída en el número diario de muertes reportadas en el estado. También dijo que las admisiones en unidades de cuidado intensivo y las intubaciones diarias disminuyeron y que la tasa de pacientes dados de alta hospitalaria fue “muy alta”.
Pero Cuomo advirtió que aún es demasiado pronto para determinar si la tendencia se mantendrá, llamando a los acontecimientos “algunas señales que son un poco esperanzadoras” de que el estado está llegando a su punto máximo en los casos y comenzará a estabilizarse.
En todo el país, los líderes estatales todavía están luchando para reunir suficientes recursos para combatir el brote.
La oficina forenses y mortuorias en Nueva Orleans han alcanzado su límite, dijo la alcaldesa LaToya Cantrell. Ella le ha pedido al gobierno federal refrigeradores adicionales. La ciudad también está respondiendo a la afluencia de pacientes y convirtió su centro de convenciones en un hospital de emergencia que abrirá el lunes.
Hubo más de 13.000 casos reportados de coronavirus y 477 muertes en Louisiana el lunes temprano.
El gobernador de Louisiana, John Bel Edwards, dijo el domingo que su estado podría quedarse sin ventiladores para el final de la semana si los casos continúan aumentando.
Hubo también un duro golpe en Pensilvania, que experimentó un aumento de 1.494 casos el domingo, dijo la oficina del gobernador, lo que eleva el total estatal a más de 11.500. Nueva Jersey reportó otros 3.482 casos el domingo por un total de 37.505. Al menos 917 personas murieron en el estado, dijo la oficina del gobernador de Nueva Jersey, Phil Murphy.
Las fiestas religiosas amenazan el distanciamiento social
Esta semana es la Semana Santa en la fe cristiana, que conduce a la Pascua. Y con la festividad judía de la Pascua que comienza el miércoles por la noche y el mes sagrado musulmán del Ramadán a finales de este mes, quienes instan a distanciarse socialmente advierten sobre las reuniones que van en contra de las guías del coronavirus.
En una conferencia de prensa el domingo, el alcalde de Boston, Marty Walsh, instó a los fieles a quedarse en casa estas festividades.
“Sé que es algo muy difícil, como católico, celebro el domingo de Pascua la próxima semana, el domingo de Ramos hoy”, dijo Walsh. “Pero eso no es lo que necesitamos en este momento. Necesitamos oraciones en este momento, eso es lo que necesitamos”.
Muchos estados han hecho exenciones de las órdenes de confinamiento para reuniones religiosas. E incluso en estados que no lo han hecho, algunos líderes de la iglesia todavía están celebrando servicios religiosos.
El reverendo Tony Spell de Life Tabernacle Church en Baton Rouge, Louisiana, fue acusado la semana pasada de violar la prohibición del estado y el domingo se reunió nuevamente con 1.200 personas.
“No obtenemos nuestros derechos de adorar libremente del gobierno. Los obtenemos de Dios”, dijo Spell el domingo. “Preferimos obedecer a Dios que al hombre”.
Otras instituciones tienen servicios religiosos virtualmente para mantener la seguridad y la conexión espiritual.
El alcalde del condado de Miami-Dade, Carlos Giménez, agradeció el domingo a los líderes religiosos que estaban prestando servicios en línea, calificándolo como “la forma más segura de mantenernos conectados”.
Distribuyendo ayuda a los puntos críticos
Bajo el peso de la pandemia, las personas y los funcionarios están buscando formas innovadoras de ayudar a los más afectados.
El Departamento de Asuntos de Veteranos abrirá más de 1.500 camas para civiles en hospitales en varios estados para aliviar la carga sobre los hospitales bajo asedio por coronavirus, según el secretario de Asuntos de Veteranos (VA), Robert Wilkie.
La ayuda del VA se distribuirá en Nueva York, Nueva Jersey, Luisiana, Michigan y Massachusetts.
Los californianos usan máscaras caseras para evitar comprar las máscaras médicas necesarias en los hospitales que tienen pocos suministros. El presidente Donald Trump anunció el viernes el lineamiento de que los estadounidenses deben cubrirse la cara.
En otros lugares, se está trayendo personal adicional, camas de hospital y equipo médico con la esperanza de aliviar la creciente presión sobre los trabajadores médicos como la doctora Sneha Topgi, que trabaja en un departamento de emergencias en Brooklyn.
Ella describe una sala de emergencias donde parece que casi todos los pacientes, sin importar por qué vinieron originalmente, tienen coronavirus y donde los profesionales médicos están maniobrando por los pasillos donde los pacientes están en camas y camillas.
El personal escribe su nombre en el equipo de protección personal que cubre el cuerpo que usan para que los pacientes tengan una sensación de conexión con las personas que los tratan.
“Creo que todavía estamos al principio y tengo miedo. Tengo miedo por mí misma y de todos en general”, afirma Topgi.
– Dakin Andone de CNN, Sheena Jones, Laura Ly, Athena Jones y Kristina Sgueglia contribuyeron a este informe.