(CNN) – Cuando el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, entró en la Clínica Mayo el martes, no llevaba una máscara facial.
Todos los demás en el edificio la llevaban, según los periodistas que viajaban con él. Después de todo, esta ha sido la política en las famosas instalaciones de Rochester, Minnesota, desde el 13 de abril. Incluso dicen que proporcionarán una a los visitantes.
Pence fue informado de las nuevas reglas antes de su visita, dijo la clínica en Twitter, en una publicación que posteriormente fue eliminada.
“Mayo Clinic había informado a @VP de la política de uso de máscaras antes de su llegada hoy”, habían escrito.
Pero cuando Pence visitó un centro de donación de sangre y plasma dentro del edificio, tenía la cara sin protección.
Otros en la sala, incluido el Dr. Stephen Hahn, jefe de la Administración de Alimentos y Medicamentos, llevaban máscaras faciales.
La Clínica Mayo informó al equipo de Pence en los últimos días sobre la política de la clínica que requiere el uso de máscaras faciales, dijo a CNN una persona involucrada en la planificación de la visita. La sesión informativa se produjo después de que la Casa Blanca se comunicó la semana pasada sobre una posible visita. La persona dijo que cuando la clínica le contó a la Casa Blanca sobre la política, no estaba claro si Pence usaría una máscara.
Cuando Pence y el equipo, incluidos los reporteros, llegaron a la clínica, el personal de la instalación tenía máscaras disponibles para el grupo, incluido Pence. Durante el recorrido, el resto del séquito llevaba máscaras, excepto Pence.
Otra fuente familiarizada con las discusiones dijo que está claro que, a pesar de lo que dijo el vicepresidente al defenderse y no usar una máscara, el personal de Pence entiende ahora que fue un error. Los informes de noticias después de la visita se centraron en si usaba una máscara en lugar del trabajo que se realizaba en la Clínica Mayo, y el personal de Pence cree que deberían haberse asegurado de que usara una para evitar ese ciclo de noticias, dijo la fuente.
Pence evitó dar la mano; en cambio, chocó el codo con médicos y funcionarios.
Pero no llevaba mascarilla cuando agradeció a los trabajadores, conversó con los administradores del hospital y habló con un empleado de la Clínica Mayo que estaba donando plasma después de que le diagnosticaran covid-19 a fines de marzo.
Después, Pence dijo a los periodistas que no llevaba una máscara porque a menudo se le realiza una prueba de coronavirus.
“Como vicepresidente de Estados Unidos, me hacen pruebas de detección del coronavirus de manera regular, y todos los que me rodean se hacen la prueba del coronavirus”, dijo, citando pautas de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU. que indican que el uso de una máscara puede evitar que aquellos que tienen el virus lo propaguen sin darse cuenta.
“Como no tengo el coronavirus, pensé que sería una buena oportunidad para estar aquí, para poder hablar con estos investigadores, a este increíble personal de atención médica y mirarlos a los ojos y decir gracias”, dijo.
En una actualización de su sitio web el 13 de abril, la Clínica Mayo dijo que obligaría a “todos los pacientes y visitantes a usar una máscara o cubierta facial para ayudar a retrasar la propagación de covid-19”. No hacía distinción entre los visitantes que habían sido evaluados por coronavirus y los que no.
“Se les pide a los pacientes y visitantes que traigan su propia máscara o máscara facial. Si un paciente o visitante no tiene una máscara, Mayo Clinic proporcionará una”, dice el sitio web.
La guía se basa en las recomendaciones de la administración Trump. Los CDC recomendaron a principios de abril que los estadounidenses consideren usar cubiertas faciales cuando estén en público para ayudar a prevenir la propagación del virus de portadores asintomáticos. Durante aproximadamente el último mes, Pence se ha estado haciendo pruebas semanales para detectar el virus.
Al anunciar la nueva orientación, sin embargo, el presidente Donald Trump destacó repetidamente que las recomendaciones no eran obligatorias. Y él dijo que no participaría.
“No creo que vaya a hacerlo”, dijo, y sugirió que era difícil imaginar algo así en la Oficina Oval: “Usar una máscara facial al saludar a presidentes, primeros ministros, dictadores, reyes, reinas, simplemente no lo veo”.
Después de que la Clínica Mayo borró su tuit diciendo que había informado a Pence de la política de uso de máscara, apareció un nuevo mensaje agradeciéndole por su visita.
“Esperamos continuar colaborando para desarrollar pruebas y tratamientos esenciales para nuestros pacientes y comunidades”, decía el nuevo tuit.
Dana Basha y Nikki Carvajal de CNN contribuyeron a este informe.