(CNN Español) – El gobierno del cuestionado presidente de Venezuela Nicolás Maduro denunció este lunes ante la comunidad internacional una supuesta agresión “mercenaria y terrorista”, organizada desde Colombia y planificada por agentes de Estados Unidos.
El domingo el ministro de Interior, Justicia y Paz, Néstor Reverol, informó que “intentaron hacer una invasión por vía marítima un grupo de mercenarios terroristas procedentes de Colombia”.
Según Reverol, el grupo intentó ingresar en lanchas rápidas por las costas de La Guaira, con la finalidad de llevar a cabo “un nuevo intento de golpe de Estado”.
El fiscal general Tarek William Saab publicó en su cuenta de Twitter algunas fotografías de documentos y armas supuestamente ocupadas y anunció el inicio de una investigación.
El presidente de la cuestionada Asamblea Nacional Constituyente Diosdado Cabello informó que 8 personas fallecieron y 2 resultaron detenidas como resultado de la acción conjunta policial y militar.
En el comunicado de este lunes, la cancillería venezolana indica que uno de los capturados confesó ser “un veterano agente de la Agencia Antidrogas de los Estados Unidos (DEA)”. CNN no ha podido verificar esta afirmación.
Consultado por CNN, un vocero del Departamento de Estado de Estados Unidos dijo que tienen “pocas razones para creer cualquier cosa” que denuncie el gobierno venezolano. “El régimen de Maduro ha sido consistente en su uso de desinformación para distraer la atención del mal manejo que hace de Venezuela”.
Afirmó que la política de Estados Unidos es apoyar al país sudamericano para el “regreso a la democracia”.
La cancillería colombiana rechazó las acusaciones por medio de un comunicado: “Las afirmaciones que desde el régimen dictatorial de Nicolás Maduro se han realizado intentando culpar a nuestro país de supuestos hechos de desestabilización”. Y agregó que lo dicho por el cuestionado gobierno de Maduro “se constituyen en intentos por desviar la atención de los verdaderos problemas que vive el pueblo de Venezuela”.
“Se trata de una acusación infundada, que intenta comprometer al Gobierno de Colombia en una trama especulativa”, dice el comunicado.
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